Parecía ser un viernes cualquier para la actriz de teatro, Molly Glynn. Su día comenzó con una audición en las primeras horas de la mañana y para desestresarse, quiso dar un paseo en bicicleta por el parque forestal junto a su esposo, Joe Foust.
La estrella de 46 años y su pareja se encontraban en pleno pedaleo cuando una tormenta se precipitó rápidamente en la zona. No alcanzaron a resguardarse a tiempo: un árbol derribado por el temporal le cayó encima, como informa The Hollywood Reporter. No volvería a recuperar la consciencia después de eso.
El marido de Glynn llamó desesperado al 911 para alertar que su esposa estaba lastimada, según explicó Sophia Ansari, portavoz de la policía del condado Cook.
A pesar de su rápida reacción, la vocera del hospital NorthShore Evanston, Colette Urban, confirmó que la actriz de “Chicago Fire” murió el sábado.
“Molly era una de las personas más amorosas y generosas en la escena del teatro de Chicago”, aseguró David Rice, director ejecutivo del teatro First Folio. “Ella era increíblemente talentosa, increíblemente versátil. Podía manejar tanto la comedia como los dramas más profundos y oscuros”, afirmó.
La comunidad teatral de Chicago está impactada y han acudido a su funeral a expresar su conmoción y tristeza:
“Es una pérdida incalculable”, dijo Michael Halberstam, el director artístico del teatro Writers. “Ella era una madre y esposa amorosa y todos los que la conocieron se enamoraban de ella”.