Una insólita situación se vivió en el fútbol juvenil de Italia, donde Massimiliano Riccini, el entrenador de uno de los equipos, llevó a su combinado a ganar por 27 a 0. Fue justamente ese resultado, el que le significó ser despedido.

Según contó Paolo Brogelli, presidente del Invictasauro, equipo de Grosseto, en la Toscana, censuró la victoria de su equipo ante el Marina Calcio por “irrespetuosa”.

“Nos causó sorpresa y pesar el marcador del partido en el que nuestros juveniles anotaron 27 goles”, afirmó Brogelli en palabras difundidas por los medios italianos.

“Los valores del fútbol en categorías inferiores son opuestos a algo así”, añadió el directivo, que vio como dos jugadores marcaban seis goles, y otro que hizo lo mismo, pero siete veces.

“El adversario debe siempre ser respetado y eso no ocurrió hoy. Como presidente, sinceramente me disculpo ante el Marina Team. Nuestra directiva decidió de forma unánime despedir (al entrenador) al señor Riccini”, lanzó Brogelli.

Por su parte, Riccini se defendió diciendo que “nadie en el Invictasauro pensó en humillar o ridiculizar al adversario voluntariamente. Jugamos sin sectarismo, sin malicia competitiva y cometiendo muy pocas faltas (…) Los juveniles tienen la edad suficiente para entender situaciones. Marcar 27 goles no es falta de respeto, eso habría sido hacer un ‘toreo’ durante 80 minutos o ayudar al equipo contrario a marcar algunos goles”, cerró el ahora despedido animador.