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La comunicadora chilena Jacqueline Gaete, radicada en Ecuador desde hace más de 14 años, reflexiona sobre su vida en el extranjero junto a su esposo Andrés y sus dos hijos, Benja y Martín. Con una carrera exitosa en televisión, Gaete destaca su plenitud como madre y profesional, valorando el amor de su familia. Recordando su paso por programas como Calle 7 y Mekano, resalta la importancia de esos momentos en su desarrollo. Aunque deseaba una familia numerosa, hoy se enfoca en ser una mejor madre para sus dos hijos, tomando decisiones con amor propio y sabiduría.
Radicada hace más de 14 años en Ecuador, Jacqueline Gaete estableció su vida en el extranjero y hoy conforma una bella familia junto al empresario Andrés Garcerant, con quien tiene dos hijos de 4 y 5 años: Benja y Martín.
Mirando hacia atrás, la comunicadora reflexiona sobre lo que ha sido su vida desde que apareció por primera vez en la televisión chilena. "¿Qué le dirías a la Jaqueline de años atrás?", le preguntamos en Página 7. "Lo lograste nada más", precisó.
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"Lo lograste y sobrepasaste todas las expectativas. Me siento súper contenta con todo lo que he hecho. Y yo creo que uno siempre quiere más. Pero soy una mujer súper plena, tengo plenitud de todo lo que he vivido en mi vida, uno de mis sueños era ser mamá también y tengo dos hijos maravillosos, con eso me voy a quedar", partió comentando.
Gaete está enamorada de sus hijos, precisando que "me regalan tanto, tanto amor. Dios mío, tú no te puedes llegar a imaginar cómo ellos realzan mi alma todos los días. Ese fue uno de mis sueños que cumplí que me llena. No te podría explicar el amor que yo siento por esos niños. Tengo mi esposo también maravilloso, estoy feliz con una familia linda".
Asimismo, Gaete precisó que se pudo comprar su casa y estar en televisión. "Cosas que jamás imaginé que yo podía hacer. Muchas veces no pensamos que podemos animar un programa con tanta tranquilidad. Ahora yo lo hago como si nada, porque me encanta. ¿Qué iba a saber yo que iba a ser jurado?, actuar en una serie. Son tantas cosas que he podido hacer que nunca me imaginé que lo iba a hacer".
"En pocas palabras, a mi yo de años atrás le digo: 'lo lograste, y con creces'", aseguró.
Jacqueline Gaete y su paso por Mekano y Calle 7
Jacqueline Gaete participó en varios programas juveniles, como Calle 7 y Mekano, espacios icónicos de los 2000'.
"Tengo los mejores recuerdos de todos los programas en los que estuve en Chile. Yo creo que esa es la base para poder lanzarte al ruedo y descubrir si es lo tuyo o no", precisó.
"Yo entré sin querer queriendo a la televisión en Chile y al principio te puedo decir que me daba todo súper vergüenza, no me atrevía a hacer nada. Mi mamá incluso me decía, 'Jaque, pero baila un poco porque no te mueves en la televisión', porque me daba todo vergüenza. De ahí me iba a animar eventos y ahí empezó todo este descubrimiento de esta Jaque que no sabía que existía realmente, porque no era la televisión lo mío en ese momento".
La animadora precisó que "Calle 7 fue increíble, qué programa más lindo, siempre me topé con gente linda. Yo no tengo recuerdos malos, de ningún sentido en cuanto a televisión. Traté siempre de hacer las cosas bien, de ganarme el cariño de la gente y lo fui logrando".
"De Mekano, imagínate. Entré en la parte donde ya no era tan popular. Como que bajó un poquito su rating, pero aprendí muchísimo de todos los que estaban ahí. También estuve en el reality Año Cero, ese sí me ayudó a crecer, muchísimo. Estar encerrada como 4 o 5 meses fue un crecimiento personal interno que hice ahí impresionante y eso también me ayudó a descubrir que podía viajar sola, que podía lograr cosas, que si quería irme a cualquier lado lo podía hacer".
La maternidad y su trabajo
Alguna vez Jacqueline Gaete precisó que le gustaría tener muchos hijos; sin embargo, hoy en día tomaron la decisión familiar de quedarse solo con sus dos pequeños.
"Siempre quise tener como seis hijos, imagínate. Es tan difícil la maternidad, después de tener dos hubiese tenido una tercera. Quería la niña, o sea, primero quería tener seis. Quería tener una familia grande porque soy yo y mi hermano en mi familia, y es poquito”, comentó.
"No tuve una hermana con quien compartir cosas de mujer. Tuve mi primer hijo y fue muy duro. Después llegó el segundo cuando el primero todavía no se lanzaba, con muy poca diferencia de edad y fue mucho más duro. Te vas dando cuenta que tienes que tener prioridades. Los gastos son enormes, también con hijos y todo, pero más allá de eso, yo creo que una como mujer se tiene que cuidar y yo preferí elegirme. Me costó mucho levantarme de la maternidad y poder volver, todavía está ese cansancio, pero lo he sabido manejar".
Finalmente, reflexionó en que "creo que si tuviera una niña, que todavía hay posibilidad y todo, pero no, la decisión ya está tomada, que no. Sería como dejarme a un lado por la niña y no es justo, pienso yo".
"Eso es lo que tenemos que entender muchas veces las mamás, que tenemos que decidir amarnos como mujer y no dejarnos tanto de lado, porque lamentablemente la maternidad es así. Te puede jugar una mala pasada y te puede hundir o te puede levantar. Tienes que saberlo, manejar y saber enfrentarla. Me elegí para ser mejor para mis hijos también", cerró.
