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El estreno del live action de Cómo entrenar a tu dragón fue un rotundo éxito en taquilla y crítica en 2025, convirtiéndose en una de las películas más exitosas del año. Dean DeBlois, director de la saga animada original, se propuso complementar en lugar de reemplazar la versión animada, logrando una selección cuidadosa de escenas y mayor profundidad en los lazos entre personajes. Destacó una escena incómoda donde el actor Mason Thames, en el papel de Hipo, comió pescado real a pesar de su rechazo, para dar autenticidad a la escena.
El estreno del live action de Cómo entrenar a tu dragón arrasó en taquilla y conquistó a la crítica, posicionándola como una de las películas más exitosas de 2025.
La cinta logró enganchar a los fanáticos de siempre y a nuevos públicos, combinando fidelidad y frescura.
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El éxito fue tal que en pocos días entró al Top 10 de las más taquilleras del año y también se ubicó entre los mejores estrenos históricos de remakes en acción real.
Dean DeBlois, quien dirigió la saga animada, estuvo al mando de esta apuesta y su meta fue clara: no reemplazar el clásico, sino complementarlo.
El propio director explicó que quiso "crear otra versión, pero no una que reemplazara la película animada", y buscó "conservar los mejores aspectos del original, añadiendo mejoras buenas, sutiles y significativas".
El resultado fue una selección cuidadosa de escenas y una mayor profundidad en los lazos entre personajes. Todo acompañado de espectaculares avances técnicos.
La escena más incómoda de Cómo entrenar a tu dragón
Una de las escenas más comentadas muestra el primer acercamiento real entre Hipo (Mason Thames) y Chimuelo, cuando el joven ofrece pescado, y el dragón le recibe la comida, pero regurgita la cabeza e invita al vikingo a comerla.
Thames decidió vivir la incomodidad real para dar mayor veracidad, por lo que, pese a su rechazo al pescado, lo comió en pantalla para que la escena resultara creíble.
En entrevista con The New York Times, contó que pudo haber usado un pescado falso, hecho con pollo o atún real. Eligió el atún, aunque le daba asco, para lograr una reacción genuina.
"Cuando le di la primera mordida, de verdad que casi vomito. Me tomó como unos 20 segundos poder tragar. Dean (el director) gritó 'corten' y después dice: 'Perfecto, ahora necesito que des un bocado más grande'", recordó el joven actor.



