En febrero pasado, Alejandra Fosalba celebró 20 años de matrimonio con su esposo, Lars Jaederlund.
Junto a una fotografía de su boda, la actriz de Juego de Ilusiones compartió un sentido mensaje en Instagram.
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"Hace 20 años nos casamos con Lars, junto a nuestra Fio, que tenía 1 año. Pronto llegaría nuestra Anya", expresó.
"Hicimos las cosas del modo que fuimos sintiendo, alejados de las reglas y lo que se debería en esos tiempos".
"Bueno, funcionó. Aquí seguimos juntos y orgullosos de nuestra familia. Viva el amor", cerró.
Lars Jaederlund: el esposo de Alejandra Fosalba
Lars Jaederlund no es parte de la industria de la TV, sino que es arquitecto y músico.
Según detalla en su perfil de LinkedIn, estudió en la Universidad de Chile.
Unos años después de titularse, se fue a España a perfeccionarse.
En Universidad Politécnica de Madrid realizó un máster en Tecnologías Avanzadas en Construcción Arquitectónica.
Además, se especializó en Arquitectura Bioclimática y Edificación Inteligente.
Pero la arquitectura no es su única pasión, también lo es la música.
Como mencionamos, Lars también es músico y actualmente es integrante de Jirafas, una banda de rock contemporáneo.
Su historia de amor con Alejandra Fosalba
En 2020, en una entrevista con Martín Cárcamo, la actriz relató su historia de amor, la cual es bastante especial.
Lo anterior, ya que conoció a Lars en su juventud y se reencontró con el casi una década después, comenzando ahí su relación.
"Yo era bien inestable emocionalmente, pololeé mil veces y duraba nada (...) En esa época lo conocí a él, en una disco", recordó.
Alejandra contó que ese día salió con Guido Vecchiola y la sacó a bailar "un rubio alto, medio rockero".
Después de un rato, Lars le pidió su número y ella se lo dio después de irla a dejar al hotel, junto a Guido.
“De ahí salimos como tres meses. No pasó nada, absolutamente nada, hasta que se me declaró. Y yo, con esta emocionalidad extraña que tenía, dije ‘ay, no sé’".
Fosalba contó que después de un tiempo se cambió de casa y perdieron contacto, ya que ella le había dado su número fijo, ya que en ese tiempo no había celulares.
“Perdimos el rastro, pasaron como ocho años (...) y un día me despierto y me acuerdo de él, digo: '¿Qué será del Lars?’", relató.
"Llamé a Guido, le dije ‘¿te acuerdas del Lars?’ y me dice ‘sí, ese rubio, qué simpático era'... a los dos días me encuentro con él en la calle". Te lo juro".
"Después de unos ensayos me fui al Tavelli del Drugstore. Me fui a comer un helado con mi gente y me encuentro con él. Te juro que fue… hasta el día de hoy piensa que estoy loca, porque lo vi y (grité)", contó.
"Imagínate, llega una mina, te encuentras con ella y grita. Él quedó así como ‘¡¿qué pasó?!’. Y yo le digo ‘es que no lo puedo creer, me acordé de ti hace dos días’", añadió.
La actriz contó que ese día de inmediato lo vio "con otros ojos" y que está segura que fue "el destino, la vida, el universo o Dios" los volvió a unir.
“Ahí me dio su teléfono, lo llamé yo. Me la jugué como no me la había jugado antes. Estuvimos conversando y después empezamos a pololear", acotó.
Finalmente, desde ese día no se separaron más y hoy conforman una bella familia junto a sus hijas, Fiona y Anya.
