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En la Parada Militar de este viernes 19 de septiembre, además del desfile en el Parque O’Higgins, se destacará la emotiva despedida del perro militar Drako, quien se retira tras casi diez años de servicio en el Ejército de Chile. Drako, un pastor belga malinois de gran disciplina y lealtad, formó parte de operaciones clave como detección de explosivos y descensos desde helicópteros. Tras la ceremonia, el sargento Rodríguez acogerá a Drako en su hogar para disfrutar de un merecido descanso. El Ejército reconoce su legado y le agradece por su servicio, pasando de ser un can militar de elite a un fiel compañero de hogar.
La Parada Militar de este viernes 19 de septiembre no solo estará marcada por el desfile de tropas en el Parque O’Higgins, sino también por una emotiva despedida: la del perro militar Drako, quien colgará su arnés tras casi diez años de servicio en el Ejército de Chile.
Este pastor belga malinois, nacido el 5 de abril de 2016 en una camada institucional, destacó desde sus primeros días por su disciplina, lealtad y temple, indicó T13.
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Desde entonces, se convirtió en parte fundamental de la Unidad Canina Militar del Regimiento de Policía Militar N° 1 “Santiago”, donde participó en labores tan delicadas como la detección de explosivos, intervenciones tácticas y operaciones de seguridad militar.
Drako: Un perro de elite que se despide en la Parada Militar
Drako también fue desplegado en zonas fronterizas y se integró a la Brigada de Operaciones Especiales “Lautaro”, donde incluso realizó descensos desde helicópteros junto a su guía.
El sargento 2° Francisco Rodríguez, su inseparable compañero, destacó la calidad y compromiso del can: “El nivel de compromiso, el fiato que el amo forma con el perro es excepcional. Es muy buen perro, con un buen nivel de adiestramiento, es fenomenal, un ejemplo para los perros más nuevos”.
Con emoción, añadió: “Mi compañero de labores, Drako, es un perro único, por su carácter, su fortaleza, es muy bueno para trabajar, con una gran energía”.
Una nueva vida
Al terminar la ceremonia de la Parada Militar, Drako se retirará con todos los honores y comenzará una nueva etapa junto a la familia del sargento Rodríguez, quienes abrirán las puertas de su hogar para darle el descanso y cariño que merece.
Desde el Ejército subrayaron la importancia de su legado: “Hoy, el país lo despide con orgullo y gratitud. Porque no todos los héroes llevan uniforme. Algunos, simplemente, caminan en cuatro patas, con la cabeza en alto y el corazón lleno de lealtad”.
Así, Drako pasará de ser un can militar de elite a convertirse en un fiel compañero de hogar, cerrando una historia de servicio este viernes.



