“Fue chocante”: el dramático testimonio de chilenos que sobrevivieron a atentado en Bondi Beach

Gran conmoción a nivel mundial provocó el atentado registrado este domingo en Bondi Beach, una de las playas más emblemáticas y concurridas de Sídney, Australia, donde 16 personas perdieron la vida tras un violento ataque calificado como terrorista y antisemita.

El macabro hecho tuvo lugar mientras se desarrollaba una celebración de la festividad judía de Janucá en el sector, por lo que había un ambiente sumamente familiar y más de cerca de un millar de asistentes, según confirmó la policía.

De acuerdo con la información entregada por las autoridades australianas, el ataque fue perpetrado por dos personas: un padre de 50 años y su hijo de 24.

El primero murió en el lugar, mientras que el joven fue reducido por la policía y quedó bajo custodia policial.

En tanto, respecto a las víctimas fatales, se conoció que 14 personas murieron en el lugar de los hechos y otras dos fallecieron posteriormente en el hospital, con edades comprendidas entre los 10 y los 87 años.

Entre ellas se encuentra una niña de 10 años, un rabino nacido en Reino Unido, un oficial de policía retirado, un superviviente del Holocausto y un ciudadano francés.

Los chilenos sobrevivientes al atentado en Bondi Beach, Australia

Entre los sobrevivientes se encuentra un ciudadano chileno, cuyo testimonio ha permitido dimensionar la magnitud del horror vivido en la popular playa.

Se trata de Camilo Díaz, un estudiante de 25 años, quien se encontraba en el mismo sector donde ocurrió el atentado y que relató su experiencia a la agencia internacional AFP.

“Escuchamos los disparos. Fue impactante. Se sintió como diez minutos solo de ‘bang, bang, bang’. Parecía un arma potente”, señaló el joven, quien logró ponerse a salvo en medio del caos desatado tras el ataque.

Otro testimonio chileno que dio cuenta del clima de temor que se apoderó de la ciudad fue el de la periodista Camila Estay, quien se encontraba en una playa cercana al momento de los hechos.

“Fue inesperado. Esta es una ciudad re tranquila. Además, habíamos notado que el índice de delincuencia había aumentado un poco en Sídney en específico, pero no era una cosa para temer o preverlo”, comentó en diálogo con Emol, calificando lo ocurrido como “súper chocante”.

La comunicadora también relató cómo, tras conocerse el ataque, comenzaron a circular advertencias a través de redes sociales para evitar el sector de Bondi, un lugar frecuentado por distintas comunidades, entre ellas la latina.

“Acá en Australia todo se hace por redes sociales, entonces en Facebook, en donde hay páginas especiales de cada comunidad, era notificación tras notificación diciendo que nadie vaya a la playa”, explicó.

El atentado no solo dejó un saldo de 16 personas fallecidas, sino que también generó un fuerte impacto en la comunidad local e internacional, reabriendo el debate sobre la seguridad y los crímenes de odio.