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Agencia UNO
Martina Weil recordó la polémica en los Panamericanos de Santiago 2023, donde su madre, Ximena Restrepo, estuvo involucrada en un juicio por el cambio de atletas en la posta 4x400. Acusaciones de presión y maltrato llevaron a un proceso ante el CNAD, que absolvio a todos. Weil confesó el impacto emocional y la influencia en su desempeño en los Juegos Olímpicos de París 2024, sintiéndose apuñalada por la espalda en su lugar seguro, el atletismo.
Desarrollado por Bío Bío ComunicacionesMartina Weil recordó la polémica que marcó su participación en los Juegos Panamericanos de Santiago 2023, y que terminó incluso en un juicio en el que estuvo involucrada su madre, la exmedallista Ximena Restrepo.
El conflicto surgió antes de la posta 4×400, cuando Berdine Castillo y Poulette Cardoch, seleccionadas por sus marcas, fueron reemplazadas por Fernanda Mackenna y Violeta Arnaíz, por decisión del entrenador Marcelo Gajardo.
En ese contexto, se acusaron presuntos maltratos y presiones por parte de Restrepo, situación que derivó en un proceso ante el Comité Nacional de Arbitraje Deportivo (CNAD), que finalmente absolvió a todos los implicados.
"Fue penca, muy fome. La gente decidió interpretar las cosas como se les dio la gana, y eso fue lo penca. Pero me sirvió para darme cuenta rápidamente de quiénes eran las personas que iban a estar a mi lado cuando las cosas fueran mal", comentó Weil a Revista Ya.
La velocista reconoció que ese episodio tuvo un fuerte impacto emocional. "Ahora que me está yendo bien de nuevo, estoy recibiendo mucho cariño y buena onda, pero recuerdo perfectamente quiénes me acompañaron cuando se decían cosas sobre mí que no eran verdad", sostuvo.
"Me quería meter en un hoyo y no salir nunca más. Me duró harto tiempo eso. Todo el año pasado tenía cero ganas de ir a Chile, de abrir Instagram, publicar fotos, nada", confesó.
Incluso, aseguró que la controversia influyó en su desempeño en los Juegos Olímpicos de París 2024. "Al terminar, me estaban esperando y no hablé con ningún periodista, porque solo habían hablado mal de mi mamá y de mí, y además esperaban una entrevista con la cara llena de risa después de haber corrido mal", indicó.
"Es su pega, lo sé, pero es difícil no tomárselo personal cuando escriben de ti. Los tiempos que marqué no fueron tan terribles, la verdad. No fue tan malo. Pero el atletismo era mi lugar seguro, donde hice amigos, armé otra familia y sentí que me habían apuñalado por la espalda. Perdí mi lugar seguro. Cambió mi relación con el deporte", concluyó.