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Impacto por muerte de Rosa Valenzuela, encontrada en maleta enterrada en su casa, detienen a su hija por presunto parricidio. Podría recibir pena de hasta 40 años. Última persona que habló con la fallecida relata detalles en matinal. Vecina recuerda a Rosa como generosa con su nieto, pese a dificultades con su hija. Imágenes muestran a Rosa tranquila horas antes de su fallecimiento.
Desarrollado por Bío Bío ComunicacionesImpacto ha causado la muerte de Rosa Valenzuela, la mujer hallada dentro de una maleta enterrada en el patio de su casa en Recoleta y por lo que su hija mayor, Karina Prida, se encuentra en prisión preventiva mientras dure la investigación por el delito de parricidio.
La imputada podría enfrentar una pena que va desde los 15 años y un día hasta la pena máxima contemplada en el Código Penal, que podrían ser hasta 40 años.
En ese contexto, en Contigo en la mañana conversaron con quien sería la última persona que entabló un diálogo con la fallecida adulta mayor.
El matinal entrevistó a Paulina, dueña del almacén al que concurría Rosa y en el cual están las últimas imágenes registradas de ella el jueves a las 15.00 horas aproximadamente.
"Son vecinos puntuales, como relojes que vienen a comprar el pan. A las 15.15 ella estaba aquí como reloj, compró cuatro marraquetas y hallullas. Las últimas eran para su nieto", partió señalando la vecina.
Asimismo, en el matinal revelaron las últimas imágenes de Rosa ingresando al almacén, donde se le ve tranquila y conversando con la dueña.
Paulina detalló que Rosa siempre conversaba con ella. Incluso contó que cuando Karina "quemó la casa", la adulta mayor le dijo que todos se iban a enojar con ella por recibirla de nuevo.
"Ella me contó, 'mi nieto me llamó, meme estamos en la calle'. Me dijo que iba a recibirla por el nieto. Ella le cocinaba, le compraba de todo al niño", precisó la vecina.
"Nadie quería a Karina. Me dijo un día, 'no sabe na' la tontera que hice, recibí a la perla, a mi hija, solo lo hago por mi nieto, porque él me llamó, me dijo que estaban en la calle y no tenían qué comer'. Su hija menor se enojó, pero ella comentó que no podía hacer nada", explicó Paulina.
Finalmente, detalló que Rosa "estuvo resfriada la última semana, se puso la influenza y le cayó mal. El jueves vino súper bien. El día viernes no vino, me acordé de ella, pero no pensé más allá".