Una verdadera tragedia fue la que enfrentó una familia en Colombia, luego que David Santiago Bedoya, un niño de 11 años, falleciera, luego de comer lo que parecía ser una inofensiva gomita.
Lo que no sabía el menor de edad y su círculo cercano era que al interior del producto se encontraba una potente droga: LSD.
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Yuli Andrea Gordillo, la madre del pequeño, relato a RCN que el paquete de gomitas, se las regaló un extraño, cuando el niño daba un paseo junto a su tía y su hermana, de 15 años, a fines de enero.
“Llegó un sujeto que les regaló unas gomitas por lo que ellas las trajeron a la casa y las dejaron en la mesa. En la tarde del jueves (al día siguiente), David Santiago y su hermana encontraron los dulces y se comieron de a uno”. manifestó la mamá.
“No siento la cara, tengo frío…”
Los síntomas fueron casi instantáneos, pero afectaron mucho más al menor de los hermanos. “Paula no siento la cara, tengo frío, llame a mi papá”, dijo David Santiago, quien fue ayudado por su hermana, aunque ella también era afectada por el alucinógeno.
Tras esto, el menor de edad fue por una de sus tías. “Mi hermana llegó hasta la casa, allí trataron de ayudar a mi hijo, lo metieron a la ducha para cortar el efecto de la droga, pues se dieron cuenta que había sido el dulce”, relató la madre.
“De allí llevaron a mi pequeño al hospital, pero llegó sin signos vitales”, agregó la mujer, quien ahora busca respuesta a lo que pasó.
“Mi hermana ha entregado varias versiones sobre lo que pasó, nosotros queremos que las autoridades aclaren esta situación que hoy nos deja un gran vacío”, cerró.
