Paulina de Allende-Salazar presentó este martes en Mucho Gusto un reportaje donde hablaron los protagonistas del brutal caso ocurrido en octubre del año pasado, que fue cuando un joven fue empujado al río Mapocho por un carabinero, en medio de manifestaciones.
A cinco meses de ocurrido el hecho en el puente Pío Nono, la periodista del matinal habló con la madre del menor que cayó al Mapocho; con Sebastián Zamora, el excarabinero que protagonizó el hecho; y el menor de edad que terminó en el río, totalmente inconsciente.
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“Hay gente malhablada que dice que mi hijo es un delincuente, cuando no lo es. No está haciendo portonazos, tiene sus antecedentes limpios. Él es un cabro bueno, es deportista, todo lo que dijeron es mentira”, expresó Daisy Alvear, la madre del joven.
Por su parte, Sebastián Zamora, excarabinero que está siendo investigado por el delito de homicidio frustrado, acusó que si bien había identificado al menor de edad, por haber estado lanzando piedras con tu carro policial, nunca tuvo la intención de lanzarlo al río Mapocho.
“Nunca pensé que podría pasar, no quise empujarlo. En mi mente pensaba hay que sacarlo, me fui al carro y estaba en shock. Decía ‘lo maté’, y pensé en bajar, pero los manifestantes no discriminan entre un carabinero bueno o uno malo”, dijo por su parte Zamora.
Menor de edad lanzó reflexión tras lo ocurrido en el puente Pío Nono
Paulina de Allende-Salazar también conversó con el joven que terminó en el río Mapocho tras ser empujado por este carabinero. Al ser menor de edad no se reveló su identidad, ni tampoco se mostró su rostro, pero sí se le dejó expresar su pensamiento.
“Soy tranquilo, no molesto a nadie, ni a nada (…) Da rabia e impotencia que nos pasen a llevar por donde quieran, por eso estoy ahí (en las protestas). Por eso todos mis compañeros están luchando, no por hacer desórdenes, ni por ser delincuentes, es luchar por algo más digno, una sociedad más digna”, expresó en el matinal.
El joven quedó con lesiones en sus muñecas tras caer desde el puente Pío Nono, por ese debe utilizar diariamente unos fijadores para cuidar sus secuelas físicas.
Y si hablamos también de golpes emocionales, el menor de edad también sufrió por la muerte de su tío Francisco Martínez, el malabarista que fue abatido por carabineros en Panguipulli.
“Tengo mucha rabia y pena en mi corazón por todo esto. Yo estoy luchando por algo más justo y necesario. Yo lucho por mi justicia y por mi tío”, explicó el entrevistado, que cerró diciendo que “me gustaría que el país en el futuro sea igualitario, que todo sea por igual, pero no mirarnos en menos por ser del pueblo”.
