La noche de este jueves se dio a conocer la lamentable noticia de la muerte de un menor de 13 años con COVID-19.

Según informó T13 en su edición prime, el niño estaba internado en el hospital pediátrico Luis Calvo Mackenna de Providencia y recientemente se había sometido a un trasplante de médula.

Cabe mencionar que aún se desconoce si el menor falleció producto de COVID-19 o por otra enfermedad. Lo anterior, puesto que estaba inmunodeprimido, es decir, su sistema inmune era muy débil.

En un punto de prensa, Jorge Lastra, director del hospital Luis Calvo Mackenna, informó que la muerte del menor ocurrió en la madrugada de este jueves y que el pequeño se contagió luego que fuese visitado por una persona que dio COVID-19 positivo.

“(Su estado) se empezó a complicar, decidimos trasladarlo y aislarlo a la Unidad de Cuidados Intensivos, donde se mantuvo hasta ayer. Hace dos días volvimos a evaluar la PCR y salió positiva. Requirió ventilación mecánica y lo asistimos, pero ayer falleció”, explicó.

Lastra indicó que previo al contagio, la situación del niño ya era compleja. Tras el trasplante, su situación empeoró por “una enfermedad de injerto contra huésped, que es una enfermedad muy severa, la cual le produjo daño gastrointestinal y posteriormente hizo compromiso renal”.

Ante la pregunta de por qué el niño tuvo visitas teniendo en cuenta su estado, el doctor afirmó que se debía tener en cuenta que pacientes como él pasan meses en hospitales y la restricción total puede ser muy traumática para ellos.

“Esta una situación que va negociando progresivamente con los padres. Ustedes entenderán que una madre que ‘abandona’ por mucho tiempo a sus hijos sufre, y nosotros estamos convencido que los niños también necesitan cariño. Por eso lo hicimos”, afirmó.

A la fecha, 1982 niños se han contagiado de coronavirus en Chile. Del total 82 han necesitado hospitalización y 15 han recibido tratamientos intensivos.