El filipino que fuera campeón del mundo en ocho categorías y además elegido diputado, intentará demostrar su clase en este deporte, a pesar de su 1,69 metros de estatura.
El boxeador ha sido contratado como entrenador y como jugador del Kia, que debutará el 19 de octubre en la liga filipina, en un país que cosecha buenos jugadores, y que en el último mundial de España cayó en la fase de grupos.
Algunos gigantones de los equipos de básquet de su país, ya lo han criticado y advertido que no recibirá buenos tratos, apunta la agencia informativa AFP. “No pretendo hacerle ningún mal pero jugaré como siempre ante él. No voy a cambiar porque se llame Manny Pacquiao”, avisó Beau Belga, de 1,95 m y 113 kilos, que juega en el Rain or Shine.
Pacquiao, de 35 años, defenderá en noviembre su título de la Organización Mundial de Boxeo de welters, contra el estadounidense Chris Algieri en Macao.