En 2019, un joven rugbista de la Universidad Católica denunció recibir un brutal “bautizo” por parte de sus compañeros, durante una gira a Francia.

Con 16 años en ese entonces, Manuel relató que durante el ritual de iniciación fue agredido por más de 10 compañeros, terminando inconsciente y con varias heridas en el rostro y cuero cabelludo.

Esta situación generó que la familia demandara a la institución, ya que a su juicio hubo negligencia, puesto que ninguno de los encargados de acompañar a los jugadores hizo algo al respecto.

El joven agredido entregó su testimonio a Meganoticias: “Eran aproximadamente las 6 de la tarde. Habíamos recién terminado el partido. Tuvimos una conversación de grupo y después nos fuimos al camarín”, afirmó.

“Siempre que hacíamos las giras escuchamos típico de los entrenadores que nos decían que teníamos que obligadamente hacerlo”, agregó.

Tras esto, Manuel sostuvo que “me levantan de la silla, a la fuerza, me agarran en el aire y me empiezan a pegar y ahí me empiezan a cortar el pelo en el aire”.

“Como me resistía, me llegaron codazos en las costillas, en la cara, el pómulo. Terminé con varias contusiones”, aseguró.

El reclamo del padre de rugbista agredido

El padre del joven acotó que solo gracias a su insistencia, decidieron llevar a su hijo a la clínica: “Yo llamo hasta el presidente de la rama, pero lo llevan con muchas horas después. Lo llevan a las dos de la mañana”, comentó.

Estos cabros se mimetizaron en el grupo. Nadie los castigó. A mí se me dijo en una primera entrevista que iban a quedar todos sancionados. El gerente deportivo me dijo que se iban a prohibir, después no pasó nada”, añadió.

Cabe señalar que la familia de Manuel demandó a Universidad Católica por esta situación en agosto del año pasado y el 29 Juzgado Civil de Santiago falló a favor de ellos.

El club fue ordenado a pagar 15 millones de pesos, medida por la que el club acudió a la Corte de Apelaciones.