Diez años de presidio deberá cumplir una mujer acusada de matar en medio de la vía pública al hombre que la había violado cuando ella era menor de edad.
A la acusada -de actuales 25 años- se le imputó el delito de homicidio simple por los hechos ocurridos en Calama, región de Antofagasta, a finales de julio de 2021.
Según consignó Meganoticias, la víctima estaba bebiendo alcohol en la calle junto a un grupo de personas, entre los que se encontraba la condenada.
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“En un momento, la acusada comenzó una discusión con la víctima, extrajo desde sus vestimentas un cuchillo y le propinó un par de puñaladas en diferentes partes del cuerpo, generando una de ellas una lesión corto penetrante en región dorsal central”, detalló el fiscal jefe, Cristián Aliaga.
“La segunda herida fue una lesión en el tórax, herida que generó un shock cardiogénico con hipovolemia por perforación aórtica torácica y hemotórax secundario a herida penetrante torácica por arma blanca, lo que trajo como consecuencia la muerte de la víctima”, añadió.
“Tras lo anterior, la acusada huyó del lugar a bordo de un vehículo junto a terceras personas, siendo detenida de manera posterior”, cerró Aliaga.
#Calama Fiscalía logra condena 10años y 1día de presidio efectivo para autor de #homicidio y que protagonizó discusión en vía pública. Fiscal Cristian Aliaga @FRANTOFAGASTA @FiscaliadeChile lo acreditó con testimonios, pruebas periciales,fotos,otros.
NOTA📰https://t.co/tW59v6EBHD pic.twitter.com/fAAEVWi4NI— Fiscalía Regional de Antofagasta (@FRANTOFAGASTA) August 31, 2022
Imputada había sido agredida sexualmente por la víctima
Cabe mencionar que el Tribunal Oral en lo Penal (TOP) decidió no tomar en cuenta la agresión sexual de la que había sido víctima la acusada años atrás.
“El TOP desestimó la tesis de la Defensa en orden de la necesidad de fallar con perspectiva de género, en especial, porque la acusada había sido violada por la víctima cuando era menor de edad”, señaló el fiscal.
De todos modos, en la resolución el tribunal reconoció “la situación, el abandono que sufrió en su infancia, la violencia recibida desde pequeña, la agresión sexual denunciada y las carencias que la acusada experimentó desde su adolescencia”.
El documento asegura que todos esos antecedentes “se constituyen en factores de vulnerabilidad que, en otro caso, bajo otros supuestos, podrían haber contextualizado la conducta de la acusada y entregar luces que permitieran entender por qué obró de la forma en la que lo hizo, pero que en el caso de marras no resultan aplicables”.



