Una polémica celebración religiosa sucedió en España, cuando un sacerdote en estado de ebriedad ofició una misa en la parroquia Nuestra Señora de la Consolación.

El reprochable actuar del párroco Juan Rubio Fernández fue viralizado gracias a un video de TikTok, que mostró al sacerdote protagonizando un bochornoso momento frente a 100 personas.

En la ceremonia religiosa, decenas de niños iban a realizar su Primera Comunión, informó Antena 3.

En el registro se ve que durante la celebración, el sacerdote bebió el vino del cáliz y, antes de ofrecer la comunión a los feligreses, eructó fuertemente.

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Sacerdote presentó la renuncia

Después de la polémica, Rubio renunció a ser párroco de dicha iglesia, según comunicó la Archidiósesis del lugar. Además, se dio a conocer que el sacerdote llevaba años luchando contra el alcoholismo, por lo que buscará ayuda para superar su adicción.

“Muestro mi decisión firme de ponerme en manos de profesionales que puedan ayudarme a superar la situación personal en la que me encuentro, confiando en que pueda restablecerse lo antes posible”, informó.

Pido disculpas por el escándalo que este hecho haya podido causar, tanto a la feligresía de la parroquia a la que sirvo, como al Pueblo de Dios, que haya podido verse ofendido por las imágenes que se han difundido”, finalizó.