Una de las preguntas que muchas personas se hacen en esta época del año, es cuál es el método correcto para cuidar la piel del rostro sin dañarla, sobre todo por la alta exposición a los rayos del sol.
En Página7 quisimos ahondar en el tema, y para eso conversamos con el doctor Mauricio Rivas, dermatólogo de la plataforma online Dermacné.
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Lo primero que hay que saber es reconocer qué piel tenemos, para eso, nos explicó que hay cuatro tipos básicos.
“La piel sensible es aquella que no tolera los productos dermatológicos y que se irrita con facilidad; la seca es aquella que tiende a tener escamas, falta de hidratación o xerosis; la piel grasa es la que tiene exceso de producción de sebo y se siente oleosa al tacto; mientras que la mixta es una mezcla de piel seca y grasa en la zona centro”, partió señalando.
Sin embargo, sostuvo que para los dermatólogos, “esta clasificación no es tan relevante porque muchas veces la categoría de la piel cambia en el mismo paciente con el tiempo”.
De hecho, reveló que puede ocurrir “muchas veces durante un mismo mes. Por ejemplo, las mujeres tienden a tener la piel más grasa durante su periodo menstrual y más seca a mediados de este. Para nosotros es más importante ver qué patologías hay en tu piel y cómo funcionan los productos que te indicamos”.
¿Cómo cuidar la piel según tu tipo?
El experto señala que a grandes rasgos, “para cuidar una piel sensible, debe hacerse con elementos con la menor cantidad de productos químicos, jabones tipo syndet o aguas micelares suaves. A veces protectores solares del tipo mineral, son los indicados en estos casos”.
En cuanto a la piel mixta, indicó que hay que ocupar “productos que no sean ni grasosos, ni tan fluidos. Y dejamos protectores solares para pieles normales”.
En piel grasa, sugiere preferir jabones con ácido salicílico o levemente exfoliantes. “Se usan cremas o emulsiones fluidas y protectores solares fluidos o ultra fluidos”, sostuvo.
Finalmente, para la piel seca, señaló que “preferimos cremas más espesas o en casos extremas, ungüentos. No se usan jabones y solo agua micelares de limpieza suave y protector solar en crema”.
El doctor menciona que a la hora de comprar una crema, “es importante que sea de una buena marca dermatológica, que sea apropiada para tu tipo de piel de acuerdo a lo que ya vimos. No usar cremas o protectores solares de cuerpo en el rostro, porque tienden a tener características distintas y productos habitualmente más agresivos”.
Asimismo, recalcó a las personas que “desconfíen de cremas milagrosas que tienen la solución para todo, que muestran cambios radicales, porque eso, lamentablemente, no existe. Una buena rutina dermatológica y buena protección solar, son las claves del éxito”.
Rutina de Skincare
Rivas sostuvo que “lo primero es que tenga un limpiador y un agua micelar facial de día y de noche. Una crema humectante de día y luego el protector solar, que es lo más importante”. Aseguró que “debe ser al menos de factor 30 o más y aplicarlo mínimo cada cuatro horas, incluso si se está a la sombra o casa”.
Agregó que “la crema de noche puede tener un ácido, como el glicólico, retinol, u otro producto según el tipo de piel que tengas. Eso es lo más simple, si se pudiera complementar con un suero de vitamina C, tónico o contorno de ojo, lo vamos complejizando en la medida que se vaya conociendo el avance”.
En cuanto a la forma más simple de cuidar la piel, señaló que “es usando protector solar. Es la forma más importante de todas, es la mejor crema antiarrugas, antimanchas y anticáncer que existe. Si tienes un presupuesto bajo o solo quieres una sola crema, el protector solar es lo más relevante”.
Para finalizar, el dermatólogo indicó que hay que tener cuidado con los productos naturales, “muchos de ellos ya están incorporados en las cremas que usamos día a día los dermatólogos, a dosis y concentraciones seguras probadas, incluso en aloe vera”.
Por esto, “no recomendamos la utilización de productos naturales crudos directamente en la cara o en el cuerpo, o que tú mismo los extraigas, porque muchas veces provocan dermatitis de contacto, incluso fitofotodermatitis, que son reacciones del vegetal con la piel y con el sol que dejan manchas por varios meses”, cerró.
