Desde el 30 de noviembre pasado, los beneficiarios comenzaron a recibir el último Ingreso Familiar de Emergencia Universal (IFE).

Si bien algunos tenían la esperanza de que el beneficio se extendiera hasta marzo, el Gobierno zanjó esa posibilidad.

Lo anterior, apelando a focalizar los gastos en subsidios al empleo, como el IFE Laboral.

Cabe señalar que un mes de IFE Universal tiene un costo aproximado de 3 mil millones de dólares, por lo cual el diputado socialista Jaime Naranjo reconoció que la decisión de extenderlo es compleja.

“Yo le haría un llamado al Gobierno, que pudiéramos hacer una propuesta muy selectiva y acotada, a ciertas personas que realmente lo necesitan“, precisó el parlamentario a BioBioChile.

Asimismo, el jefe de bancada del PPD, Raúl Soto, apuntó a “hacer un último esfuerzo”. “Estamos en un proceso de reactivación. Necesitamos el último empujón del Estado para las familias chilenas, para pagar deudas y emprender”, planteó.

Sin embargo, en el oficialismo respaldan al Gobierno sobre la estrechez de las cuentas fiscales.