Paris Hilton dio su testimonio frente a la Comisión de Justicia Criminal de la Legislatura estatal de Utah, por los hechos ocurridos en su infancia en Provo Canyon.
La socialité Paris Hilton tiene un largo recorrido por la historia. Ha sido vinculada a conflictos mediáticos, programas de televisión, pero, en esta oportunidad, no son aquellos los motivos por los que la empresaria capturó la atención de los medios, sino porque reveló detalles desgarradores de su vivencia en la escuela Provo Canyon, un internado perteneciente al estado, en el que Paris Hilton fue humillada, abusada y torturada mental y físicamente.
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Es su propio relato el que evidencia lo acontecido, comentando que “hablar de algo tan personal fue y sigue siendo aterrador”, según consigna el medio Infobae. “Ojalá pudiera decir que fue solo un sueño, pero no es así”, señaló la modelo.
La protagonista de Paris Hilton, my new bestfriend, reality show de MTV (2008), compareció en la comisión para alegar que niños, como ella en su momento, fueron “inmovilizados, golpeados, arrojados contra las paredes, estrangulados y abusados sexualmente con regularidad” en la institución mencionada.
Paris Hilton busca ejercer presión para la creación de un proyecto de ley que exija más supervisión gubernamental en este tipo de instituciones, señala el citado medio.
La pesadilla que hasta hoy la atormenta
“No puedo irme a dormir por la noche sabiendo que hay niños que están experimentando el mismo abuso por el que pasamos tantos otros y yo”, expresó Paris frente a los encargados de llevar a cabo el procedimiento, además fue directa al pedirle al presidente Joe Biden que tome medidas.
“Este es el primer paso, este proyecto de ley definitivamente ayudará a muchos niños, pero, obviamente hay más trabajo por hacer y no voy a detenerme hasta que ocurra el cambio”, sostuvo tajante y decidida frente a las autoridades.
Al inicio de su testimonio, Paris rememoró sus peores momentos y comentó “soy una sobreviviente de abuso institucional, y hablo hoy en nombre de los cientos de miles de niños que actualmente se encuentran en centros de atención residencial en los Estados Unidos”.
“Fue hace 23 años, entonces solo tenía 16. Durante los últimos veinte años, he tenido una pesadilla recurrente en la que dos extraños me secuestran en medio de la noche, me registraron sin ropa y me encerraron en una instalación. Ojalá pudiera decirles que esta pesadilla inquietante fue simplemente un sueño, pero no lo es”. La socialité norteamericana se mostraba compungida por lo relatado, sin embargo, no se detuvo allí.
“Sin un diagnóstico, me vi obligada a consumir medicamentos que me hicieron sentir entumecida y agotada. No respiré aire fresco ni vi la luz del sol durante once meses”, narró a los presentes.
El crudo testimonio de la actriz no concluyó, ya que manifestó que cuando era niña y se duchaba era monitoreada, “sentí sus ojos penetrantes mirando mi cuerpo. Era solo una niña y me sentía violada todos los días”.
La crítica a los que integran estas entidades estatales
Fue ella la que hizo hincapié en que no busca la lástima de nadie, sino más bien, mostrar una realidad que tristemente tuvo que sufrir y que hasta hoy, miles de niños siguen viviendo.
“Las personas que trabajan, dirigen y financian estos programas deberían avergonzarse de sí mismas. ¿Cómo pueden las personas vivir consigo mismas sabiendo que este abuso está ocurriendo?”, enfatizó en medio de la solicitud al actual presidente para monitorear de más cerca las escuelas como Provo.
“Soy una prueba de que el dinero no protege contra el abuso”, concluyó.
La interprete de Fightin’ Over Me también contó su experiencia en el documental autobiográfico llamado This is Paris, que se hizo público en el año 2020.
