El príncipe Harry y Meghan Markle vuelven a estar en el ojo del huracán luego que una fuente cercana a la familia real británica revelara los regalos que recibió el pequeño Archie.

Pese a que han pasado cerca de dos semanas desde la Navidad, los presentes del primogénito siguen llamando la atención de los seguidores de la monarquía y los medios internacionales, aun cuando los padres decidieron irse a Canadá con su hijo a vivir las fiestas junto a la madre de Meghan, Doria Ragland.

De acuerdo al US Weekly, Archie Mountbatten-Windsor recibió como regalos en su primera Navidad “libros, bloques de construcción de madera y una piscina de bolas plásticas. Los regalos extravagantes no van con ellos”, dijo la fuente.

Y fue precisamente este último presente el que despertó una ola de críticas hacia la pareja, considerando el hecho de que las pelotas de la piscina son plásticas, por lo tanto, muy contaminantes. Algo a lo menos curioso si consideramos las constantes declaraciones públicas sobre el cuidado del medioambiente y el supuesto firme compromiso de los duques de Sussex con estas causas.

Otra crítica que se repitió fue la cantidad de gérmenes que suelen tener este tipo de juguetes, por lo que no sería un obsequio muy apropiado dado que a su edad, los bebés suelen acercarse todo lo que tocan a la boca.

Cabe señalar que los duques junto a Ragland, disfrutaron de uno de los lugares más idílicos de la isla de Vancouver. Allí pasaron sus días en una finca cerrada de ocho dormitorios y que cuenta con dos playas y vistas a través de la península.

Y esta tampoco sería la primera vez que los regalos que recibe Archie provocan tanto “ruido” entre la comunidad, puesto que en mayo pasado la actriz e íntima amiga de Markle, Priyanka Chopra, le regaló un soplador de burbujas elaborado en plata y perteneciente a la famosa joyería neoyorquina Tiffany & Co y que cuyo precio superaba los 300 mil pesos chilenos.