A principios de este mes, un conmovedor caso de superación personal se transformó en noticia obligada de diversos medios a nivel mundial. Su protagonista es una aguerrida niña, oriunda del condado de Kent en Inglaterra, quien demostró a millones que el amor propio es una de las cosas más valorables a las que podemos aspirar.
Nos referimos a Paris Harvey, una menor de 13 años que durante gran parte de su vida ha sido objeto de burlas por parte de sus compañeros producto de su obesidad, consecuencia de una condición metabólica que la hace ganar peso con rapidez.
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Junto con reírse de sus kilos de más, muchos de sus compañeros y asistentes a su escuela se burlaban de ella por su displasia; anomalía que le produjo una cojera, dado que su pierna izquierda es 1.5 centímetros más corta que la derecha.
Aburrida de esconderse en la escuela y aceptar los malos tratos de los niños de su edad, un día la menor decidió enfrentarse a sus miedos, dejar de sentir pena por ella misma y demostrarles que es feliz, con la esperanza de que dejaran de mofarse de ella.
Paris aprovechó un feriado local para ir junto a un amigo a la playa y, por primera vez en su vida, usó en público un precioso traje de baño en tonos rosados.
Para conmemorar su valerosa acción, la menor inmortalizó el momento con un par de fotos, las cuales compartió el pasado 27 de mayo por medio de su cuenta de Twitter. Lo que jamás esperó, no obstante, es que luego de difundir las imágenes éstas se volverían virales, superando en la actualidad los 337 mil ‘Me encanta’ y los 46 mil retuits.
Omg so I faced my biggest fear today and went to the beach in a swimsuit☺️🏳️🌈 pic.twitter.com/eeSKUE581x
— Paris #LookAtUsNow (@ArtHopeAlly) 27 de mayo de 2017
En conversación con el diario local Kent Online, Paris señaló que “En el pasado fui víctima de bullying y luego de un tiempo comienzas a creer que lo que la gente dice es real. Me volví realmente insegura por la forma en que me veía”. Sin embargo, todo cambió cuando se sacó los shorts y quedó en traje de baño: “Me quedé así por un par de horas y comencé a sentirme muy cómoda en mi propia piel. Me sentí muy orgullosa después. Fue un gran logro”.
Junto con lo anterior, indicó que “También me cuesta moverme por (el problema en) mis caderas y me es más difícil hacer cambios, en comparación con otras personas. Pero siento que no debería justificarme por ello“.
Sobre su condición, en tanto, mencionó que “Puedo comer lo mismo que come la persona al lado mío pero aumento de peso. No es como si estuviera todo el día sentada en casa ingiriendo papas fritas”.
Amor y odio en redes sociales
Si bien Paris recibió mucho amor en Twitter tras compartir la imagen, también fue blanco de críticas por presuntamente “promover la obesidad”.
Alterada por los dichos, la adolescente comentó que la gente “Juzga con rapidez y no tiene idea de quién es uno. Así que debes mantener la frente en alto, porque siempre habrá personas que juzgan pero no son importantes, y eso dice más sobre ellos que sobre ti”.
“Decidí enfocarme en el apoyo, porque el odio no se compara al amor (…) Siento que uno debe abrazar quién es. Uno no debería cambiar para que otros se sientan cómodos a tu alrededor. Enfócate en ti mismo”, agregó la joven.
Finalmente, el padre de Paris, Bill Harvey, de 38 años, valoró su gran paso: “Estoy muy orgulloso de mi hija. Paris ha pasado por muchas cosas pero es una chica normal, así que sigue adelante (…) Ella es una inspiración”.
¿Qué opinas del mensaje de esta joven? ¿Compartes su postura en torno a las opiniones de terceros y el amor propio?
