“Nadie te enseña a ser madre”, es la moraleja que Gylisa Jayne, una madre primeriza de Cornwall, Reino Unido, plasmó en una fotografía que se volvió viral, por el simple motivo de reflejar una realidad con la que muchas se sintieron identificadas.
En la fotografía, aparece la mujer tratando de depilarse las piernas en la ducha, mientras trata de bañar a su hijo pequeño. “Las cosas que nadie me dijo”, es la descripción de la imagen, donde la mujer hace un listado de cosas que aparecen al momento de ser mamá.
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A través de un largo texto, la joven señala que “han habido innumerables momentos durante mi primer año de maternidad, en que he pensado ‘por qué nadie me dijo sobre esto…””.
Primero, ejemplifica que “nadie me dijo que es perfectamente normal el admitir que no ‘amaste’ a tu bebé cuando estaba recién nacido y es lanzado hacia ti. Está bien. Me sentí de la misma forma que cuando vi mi placenta en un bowl: muy interesada en cómo lucía, pero no gracias, realmente no quería abrazarla”.
En cuanto a su cuerpo señala que “nadie me dijo que los puntos en tu vagina pueden doler mucho más que el parto, nadie me dijo que amamantar duele mucho (…) Nadie me dijo que todos querrían opinar sobre la forma en que debes criar a tu bebé”.
Además explica que ,“nadie me dijo que realmente, honestamente, jamás volvería a estar sola. Esto incluye ir al baño, ducharse y afeitarse las piernas”.
Más adelante señala que “nadie me dijo que tener un bebé haría que a veces odiara a mi marido. Que a veces realmente preferiría recostarme con el bebé. Que todo sería muy injusto. Pero también, nadie me dijo que verlo jugando/abrazando/cuidando a nuestro bebé haría que sintiera que explotaba de felicidad. Y que después cruzaría mis piernas antes de que él sugiriera tener otro”.
Finalmente concluye expresando: “y lo que sí todos me dijeron, es que estas emociones no duran por siempre. Que a veces vuelven y tú quieres salir corriendo, pero todos dijeron, cada uno de ustedes… que las cosas mejoran. Se vuelve más fácil. El tiempo pasará volando. Va a valer la pena. Y no es para siempre”.