Cada vez se vuelve más común que los padres visiten a un fotógrafo profesional para tomar bellas fotos de sus hijos en todas sus etapas, especialmente cuando son bebés. Pero en el camino para lograr el recuerdo perfecto, pueden ocurrir un par de “imprevistos”, como le ocurrió a Mark Resnick.
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Este orgulloso papá fue hasta el estudio de Gigi O’Dea junto a su esposa, Shayna Resnick, y su pequeño bebé de 10 días, Asher. Y si bien las fotos salieron maravillosas, durante el curso de la sesión el lactante no pudo controlar sus impulsos naturales, por lo que vomitó, defecó y babeó a su padre en más de una oportunidad.
“Después de pasar una hora intentando tomar fotos con él siendo delicado, finalmente logramos que Asher se relajara en la posición perfecta en mi espalda. Él decidió darle con todo, como un ruidoso cañón, y cubrió mi espalda y jeans con lo suyo. No podía dejar de reír y estaba seguro de que se estaba resbalando por mis piernas dentro de mis pantalones”, explicó Mark al medio Today.
Él agregó que sospechaba que algo así podía ocurrir, considerando que el pequeño no usaría pañal. La pareja compartió la imagen en el grupo de Facebook Life of Dad (Vida de Padre), donde ya suma más de 63 mil ‘me gusta’. El año pasado le había ocurrido algo similar al padre Al Ferguson, quien también se volvió viral por la “olorosa sorpresa” de su bebé.
Te dejamos otras tiernas -y más limpias- imágenes de la sesión:
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