Una temeraria búlgara de 80 años de edad saltó amarrada con una cuerda elástica desde un puente de 190 metros de altura, cerca de Innsbruck, en Austria, uno de los más altos de Europa, anunció la propia “saltadora” a la AFP.
Se trataba de la matrona jubilada Penka Baleva, quien recuerda haberse dicho: “Tengo que ir y hacerlo, sobreviva o muera”. Luego, eligió el día de la Asunción de la Virgen -15 de agosto-, para concretar su hazaña, con la esperanza de que esta fecha le diera suerte.
“Me provocaba mucho miedo, pero mantuve la cabeza fría y lo hice”, agregó. Baleva, que sopló las 80 velitas en junio, dijo que había perdido la esperanza de viajar a Sudáfrica para saltar desde el puente de Bloukrans, de 216 metros de altura y optó en su lugar por el Puente de Europa (Europabrücke) que atraviesa los Alpes cerca de Innsbruck, en la región del Tirol.
“Fue magnífico, con todas esas vistas espectaculares de la naturaleza alrededor”, comentó. Baleva está acostumbrada a las sensaciones fuertes, ya que es el puente número 39 del que salta y también ha practicado el paracaidismo.