Hace un par de días, una escuela de Texas (Estados Unidos) se llenó de fiesta para despedir a los alumnos que se graduaban. Entre ellos, destacaba la bella animadora Alyssa Ramirez (18), quien gracias a su sonrisa y simpatía logró convertirse en la reina de la noche. Pero lo que iba a ser un día de celebración, pronto se tiñó de tragedia…

La joven iba de regreso a su hogar conduciendo, cuando su auto se vio rodeado por las inundaciones que afectaron la ciudad el pasado domingo. Alyssa no logró escapar del vehículo y terminó muriendo asfixiada en medio de la inmersión, como detalla el medio estadounidense New York Daily News.

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Hoy, se supo que antes de morir logró llamar a su padre, alrededor de las 2:45 de la madrugada. “Ella me despierta y le digo ‘cariño, ¿qué pasa?’”, recuerda Tomas Ramirez al borde las lágrimas. “Ella me dice ‘¿papá, qué hago? Mi auto se cayó al agua. ¿Qué hago? ¿Qué hago?’”.

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Medio dormido, su padre le dijo que volviera a la ruta desde la graduación en San Antonio hasta su casa en Devine, pero ella le respondió, “no puedo, papá. El auto está goteando”. Aunque él le dijo que iba para allá, no volvió a obtener respuesta: se convirtieron en las últimas palabras que intercambiarían.

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Aunque Alyssa también llamó al 911, la inmersión ocurrió demasiado rápido y no alcanzaron a rescatarla; faltaba sólo una semana para su graduación formal. Su cuerpo no apareció hasta un día después y según los rescatistas, ella murió con una sonrisa en el rostro.

 “Uno imagina que un niño en esa situación estaría absolutamente aterrorizado. Es frío, oscuro y ella estaba en el aislamiento absoluto. Pensarías que encontrarías a un niño así con una mirada de miedo, pero ella no la tenía”, puntualizó su padre.

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Esta misma inundación ha cobrado 21 víctimas en los estados de Texas y Oklahoma; además, otras 10 personas permanecen desaparecidas.