Viajó a Brasil en busca de sol, playa, arena y la refrescante agua de Copacabana, sin embargo, no quiso irse del “país más grande del Mundo” sin conocer como es la vida en una favela. Por curiosa, pasó un muy mal rato.
“La curiosidad mató al gato” dice el refrán popular, o en este caso a la guapa Daniela Urrizola, ex integrante de Calle 7 y musa del late Toc Show. De viaje en la tierra de la samba quiso conocer la realidad de una de los sectores más pobres y peligrosos de aquella tierra, para ello llegó a La Rocinha.
Para cumplir su cometido, impulsivamente hizo parar un taxi y le pidió que la llevara a la favela, pese a que su novio –más cauto- le decía que no era buena idea. “Hicimos todo muy irregular. Tomamos un taxi para que nos llevara al Cristo Redentor y después le pedimos que nos llevara a una favela para conocer, ya que no me quería ir de Río de Janeiro sin estar en una”, manifestó la fémina a diario La Cuarta.
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“Nunca imaginé que podían ser tan peligrosas, no pudimos entrar en el auto, caminamos mucho rato por callejones donde debíamos pedir permiso a los jefes de la calle para poder pasar”, agregó.
Lo anterior no es nada comparado con lo que vino después, cuando los molestos residentes comenzaron a abordarla de forma amenazante, minuto en el que debió esconderse.
“Nos encerramos en una casa como por 20 minutos, después en otra casa. Obvio que tuvimos que pagarle a cada dueño de casa para que nos dejara pasar. Al final terminamos en unos techos, los mismos que ocupan los narcos para vender drogas. Lo hicimos todo mal”, manifestó Urrizola.
De igual forma y debido a sus estudios de sicología, remarcó al diario pop que ha tenido la posibilidad de conocer varios sectores peligrosos en Chile, claro que no le llegan ni a los talones a las favelas cariocas.
“Por mis estudios de sicología me ha tocado estar en muchas poblaciones en Chile, incluso en tomas, pero ninguna se compara con lo que vi en la favela. La gente te mira con desconfianza, había un olor asqueroso por la cantidad de animales muertos que hay en la calle. Fue terrible”, agregó poniendo énfasis en lo complicado de la situación vivida.
Finalmente y para no ser tan tajante, Daniela reconoció que igual hay gente buena y de esfuerzo en esos lugares.