El martes, un vuelo de American Airlines debió realizar un aterrizaje de emergencia, luego de sufrir una serie de fuertes turbulencias, las cuales terminaron con cuatro pasajeros y un tripulante heridos. El incidente ocurrió mientras volaban desde Seúl (Corea del Sur) hasta Dallas (Estados Unidos).

En medio del viaje, el Boeing 777-200 intentó atravesar una tormenta, lo cual los hizo terminar envueltos en turbulencias tan violentas, que varios objetos salieron disparados al interior de la cabina, provocando lesiones de consideración. El problema se extendió durante 45 minutos, hasta que lograron aterrizar en el aeropuerto de Narita, en Japón.

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Varios pasajeros subieron videos a Internet que retratan el caos, como detalla BioBioChile. Uno de ellos pertenece al usuario John, quien viajó en clase turista. “Esto es lo más aterrador que haya visto”, relata el hombre.

El segundo video lo grabó el abogado de Dallas, Marc Stanley, quien estaba en primera clase. A pesar de que allí estaban un poco más calmados, también se les cayeron varios objetos encima, incluyendo un plato de loza que se quebró sobre la cabeza de una mujer.

“Comenzó de la nada, sin ninguna advertencia. El avión cayó y la gente comenzó a gritar”, afirmó Stanley a la cadena NBC.

A pesar de lo impactante que es vivir una turbulencia mientras se vuela, el piloto Patrick Smith, explica que por más violentas que sean, es prácticamente imposible que la aeronave caiga: “Bajo ninguna circunstancia un avión puede quedar invertido, caer en espiral o precipitarse a tierra, incluso si es azotado por los vientos más fuertes o tras caer en un gran bolsón de aire”, explica.

De hecho, Smith asegura que aunque la sensación puede parecerle horrorosa a los pasajeros, en realidad estos cambios de altitud nunca sobrepasan los 6 metros.