El 28 de noviembre de 2014 será un día que marcará la vida de millones de fanáticos que reían a carcajadas con los personajes del súper comediante mexicano.
Pesar en el mundo entero ha producido la muerte de Roberto Gómez Bolaños a los 85 años de edad. Su deceso, sin duda que es doloroso, pero antes de partir deja una infinidad de rutinas humorísticas que mantendrán fresca su imagen.
Sin duda, su creación insigne es el ‘Chavo del 8’, que hasta el día de hoy goza de una popularidad tremenda en nuestro país, y cuya franquicia se traduce en poleras, dvd’s y una serie de productos infantiles.
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Sin duda, el éxito de este huérfano que vivía en un barril en la vecindad, trasciende las barreras del tiempo y la edad, considerando que hasta el día de hoy, adultos, jóvenes y niños, aún se aprietan la guata riendo con sus historias.
Otros personajes entrañables de su autoría, son el querido ‘doctor Chapatín’, un galeno de avanzada edad cuyos problemas de memoria en ocasiones le jugaban divertidos momentos de locura.
También, imposible será olvidar al súper héroe de las antenas de vinil, traje rojo y un corazón amarillo en su pecho, el ‘Chapulín Colorado’, cuyos poderes se basaban en sus intuitivas antenitas, en su chipote chillón y en sus pastillas de chiquitolina.
En nuestro país, de igual forma alcanzó algo de popularidad otra de sus creaciones, el Chómpiras, un ladrón sin mayores habilidades para el delito, puesto que ninguno de sus robos salía a la perfección.
Finalmente, en nuestro territorio Chespirito también brilló con el inolvidable, ingenuo y simpático Chaparrón Bonaparte, que se lucía en el sketch ‘Los chifladitos’ junto a su compañero ‘Lucas Tañeda’, interpretado por Rubén Aguirre (Profesor Jirafales).
Sin duda, Roberto Gómez Bolaños deja un tremendo legado, cuyos notables personajes se encragarán de mantener fresco su recuerdo por muchísimos años más.
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