Sí, tal como lo lee: el conductor de TV y rey del humor sucio, Iván “Profesor Rossa” Arenas junto a el humorista Sergio “Checho” Hirane y el comentarista deportivo Mario Mauriziano fueron condenados a 3 años y un día de libertad vigilada. El motivo tras esto: evasión de impuestos.
Como informó El Mercurio, se trata de una investigación que partió hace 11 años, después de que el Servicio de Impuestos Internos (SII) presentara una querella. Ésta concluyó con la condena de estas tres figuras de la televisión, más la ex pareja de Arenas, Mónica Arteaga. También la ex productora Paula Bocaz se vio envuelta, ya que se afirma que ella armaba las facturas falsas para facilitar el delito.
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Alejandro Rivera, ministro de la Corte de Apelaciones de Santiago, aseguró que la evasión total de los condenados ascendió a más de $814 millones y que este delito se concentró entre los años 1997 a 2001.
Además de la libertad vigilada, Rivera también los inhabilitó perpetuamente de ejercer derechos políticos (tales como votar) y temporalmente para ejercer cargos públicos. El “Profesor Rossa” junto a Hirane y Mauriziano deberán pagar todo lo defraudado y también costear el juicio. De no hacerlo, el SII puede iniciar acciones civiles.
En el caso de Arenas, se determinó que realizó “maniobras tendientes a la defraudación fiscal mediante evasión de impuestos”, como representante legal de la Sociedad Producciones Rossa Ltda. A Arteaga, su ex pareja, se le acusa de administrar esta sociedad y conseguirse las facturas manipuladas.
Hirane cayó por ser representante legal de la Sociedad Checho Producciones Ltda., mientras que Mauriziano estaba a cargo de Zeta Uno Ltda. Ambos fueron acusados de “aumentar indebidamente el crédito fiscal del impuesto al subir los costos o gastos operacionales”, explicaron en este periódico.
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Tras conocerse el resultado de la investigación, Sergio Hirane declaró a El Mercurio que “estoy tranquilo, pero nos parece injusto y contradictorio que nos absuelvan por un delito porque no hay dolo y por los otros nos condenen… Estamos seguros de que vamos a salir absueltos”, afirmó.
Tanto la defensa de Hirane como la de Mauriziano anunciaron que recurrirán a la Corte de Apelaciones para revertir la resolución. Ivan Arenas simplemente negó todos los hechos y dijo “que los trabajos se realizaron y no es cierto que las facturas fueran material e ideológicamente falsas”.
