Julio Ferreri, un docente de Tucumán, regresaba de realizar unos trámites cuando dos jóvenes armados lo interceptaron y le intentaron robar la mochila y el celular.

El profesor se negó y los salió persiguiendo, cuando alcanzó a uno de ellos, se dio cuenta con tristeza de que se trataba de un exalumno suyo.

Los jóvenes lo habían amenazado con un arma e incluso, ante la negativa de Ferreri de entregar sus cosas, los amenazaron dos veces “pero claramente la pistola no estaba funcionando”, aclaró el docente.

“Comencé a perseguirlos, y los vecinos me intentaron ayudar, hasta que entramos por un pasaje. Cuando lo agarramos me dijo ´no me haga nada profe´ y me tiró el celular”, relató al canal Telefe.

“Nosotros escuchamos mucho a nuestros alumnos”, aclaró el profesor. “Él reconoció o reconoce que algún cariño teníamos y sin juzgarlo, producto de una sociedad de consumo, siento que él es una víctima más de lo que pasa”.

“Sumado que el consumo está naturalizado en nuestra sociedad. La primera droga legal es el alcohol. Es un trabajo bastante amplio que no solo el Estado y la escuela es suficiente, tienen que estar comprometido toda la sociedad, inclusive los medios de comunicación”, explicó Julio.

“Sentí mucha tristeza y dolor. Nosotros conocemos a los jóvenes de niños, cuando entran a la secundaria. Pensamos que ellos lo hacen porque son llevados por una situación muy compleja”, lamentó.

“Me quedan las ganas de seguir trabajando en esta problemática y que no se estigmatice a los jóvenes que por situaciones vulnerables llegan a esta situación. No conozco ningún programa que hable de adicciones, ni por parte de medios de comunicación, empresas privadas, y el Estado”, concluyó.