Los últimos días se ha visto cómo en Estados Unidos se han desatado varias protestas, tras la muerte de George Floyd. Por lo mismo, se han difundido videos de detenciones a distintas personas. Un registro en particular se ha viralizado donde el protagonista es un hombre negro.

En las imágenes se ve que dos oficiales lo arrestan sin motivo aparente. Con el correr de los segundos, manifiestan que habían visto a un individuo de similares características cometiendo delitos, por lo mismo, habían decidido detenerlo.

Este hombre se defendió de inmediato, acusando que no había razón real para que eso pasara. Cuando le pusieron las esposas, leyeron su identificación y a uno de los policías supuestamente se le escucha decir ‘oficial del FBI’.

Tras liberarlo, el video de inmediato se comenzó a viralizar. Todos los que lo compartieron aseguraron que esta era la prueba del racismo en Estados Unidos.

Sin embargo, con el pasar de las horas, ha salido a la luz más información respecto a esta secuencia. Según pudimos consignar en Página 7, esta detención en realidad es una ‘fake news’: la persona no es del FBI y esto fue grabado hace más de un año.

Si bien se dice que esto fue captado en el contexto de las manifestaciones por la muerte de George Floyd, en realidad ocurrió el 01 de junio, pero de 2019. De hecho, la publicación original dice “algo me decía que tenía que guardar este video”.

La agencia AFP detalló que los uniformados que protagonizaron este hecho son del Departamento de Policía de la ciudad de Rochester, en Minnesota, que emitió un comunicado aclarando el video.

En esta nota detallan que la persona “no era un agente de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI)”, y que todo resultó ser una confusión ya que el individuo que buscaban “era más o menos de la misma altura, peso y edad”.

¿Y quién era esta persona? Se trata de Atter Monydel, un paramédico que vive en Rochester, Minnesota, y que es originario de Yuba, Sudán del sur.

Aclarado esto, que el protagonista no era del FBI, ni que tampoco ocurrió en el contexto del estallido social en Estados Unidos, no deja de sorprender el injustificado actuar de la policía.