Lilly Ross y Andy Sandness, ambos oriundos de Estados Unidos, fueron protagonistas de una conmovedora e impactante historia.

Sucede que hace un año el esposo de Lilly, Calen ‘Rudy’, tomó una potente decisión: se quitó la vida.

Luego de este doloroso momento la mujer decidió donar el rostro de su fallecido marido, el que le fue trasplantado a Andy, quien tenía la cara desfigurada tras intentar suicidarse de un escopetazo en la barbilla.

Tras este importante hito, la clínica estadounidense Mayo, donde se realizó la compleja cirugía que duró 56 horas decidió organizar un encuentro entre Sandness y la viuda del hombre cuyo rostro hoy le pertenece.

La mujer llegó al lugar junto a su pequeño hijo Leonard, para vivir el emotivo encuentro que ya se ha viralizado en la web.

Uno de sus principales miedos era ver el rostro de su esposo en otro cuerpo, pero este desapareció rápidamente al darse cuenta que sin los ojos de su marido y con mejillas que habían adquirido una forma distinta, se veía diferente al Rudy que ella amaba, pero era un hombre agradecido por la gran oportunidad que le brindó.

“Me hizo sentir muy orgullosa (…) La forma en que Rudy se vio a sí mismo… no se veía así”, consignó el portal español ABC en base a información del medio estadounidense The Guardian.

El encuentro estuvo marcado por un fuerte abrazo entre los protagonistas de esta dolorosa y esperanzadora historia, y las lágrimas de la mujer, quien no logró contener el llanto al recordar a su fallecido esposo, cuyo rostro donó para mostrarle a su hijo que su padre hizo algo bueno por otra persona.

A continuación puedes revisar el emotivo momento.