Este lunes Fernanda Hansen anunció a través de sus redes sociales que regresaba a los medios de comunicación con un programa propio en la radio Universo, el que irá de lunes a viernes entre las 10 de la mañana y el mediodía.

Esta vuelta a las pistas también implica separarse de su hija Amalia, de 1 año y 7 meses, y a quien decidió cuidar estando a su lado prácticamente 24/7 desde su nacimiento. Sin embargo, ahora que ya dejó de amamantar, le volvieron las ganas de trabajar y afortunadamante encontró un lugar donde reencontrarse con el periodismo.

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Fernanda Hansen | Instagram
Fernanda Hansen | Instagram

En conversación con LUN, la rubia explicó que igualmente la distancia le ha provocado una sensación extraña y para que su pequeña tampoco sufra desajustes a su rutina matinal, encontró “el plan perfecto”. Resulta que recientemente Hansen descubrió que existían jardines infantiles a domicilio y unas mamás que conoció en una plaza le dieron el dato.

Fue así como empezó a pegar avisos y a conversar con algunas vecinas, hasta que logró reunir a tres mamás más. El innovador sistema consiste en formar un grupo mínimo de dos niños y máximo 4, los que reúnen en alguna casa para que una parvularia a domicilio les haga clases. El único requisito es tener un espacio que se pueda utilizar como ‘sala de clases’. Fernanda, lo solucionó rápidamente: “En mi casa habilité una pieza y solo hay que tener una mesa con cuatro sillas para que los niños hagan sus actividades. Los materiales los traen las profesoras“.

Para la organización, Hansen se turna una vez al mes con las mamás para prestar la casa, y el precio para un grupo de cuatro niños, bordea los 180 mil pesos mensuales por mamá. La empresa se llama En tu jardín.

Respecto a por qué no enviarla a un jardín tradicional, la comunicadora señaló que simplemente “no quería llevarla tan chiquitita a un jardín con 20 niños”. Además, no quería que se ‘pegara’ enfermedades ni tampoco sacarla de su rutina.

Por último, reconoció ha sido una “súper buena posibilidad” y agregó, entre risas, que desde mucho antes que empezara esto, su casa ya era un jardin infantil con juguetes repartidos por todos lados.