Fue este martes en el cumpleaños de su amiga y colega Raquel Argandoña, que la meteoróloga asistió acompañada de su pareja, Marcelo Ortiz, pese a que intentaba pasar ‘desapercibida’.
Para su mala fortuna, cuando llegó se encontró con una fila de medios apostados a las afueras del local ubicado en el cerro San Cristóbal, por lo que no le quedó otra que respirar hondo, relajarse y simplemente pasar con su pololo.
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La panelista lleva pololeando un año con Ortiz (38) y hasta ahora no lo había presentado en un evento mediático. “Lo pensé mucho pero no lo voy a andar escondiendo. En mi trabajo todos lo conocen. Es mi pololo, estoy feliz, contenta, no tengo nada que ocultar pero sí cuidarlo a él, que no tiene nada que ver con el medio“, aseguró a LUN.
Cabe señalar que Michelle se separó en 2016 luego de un matrimonio de 12 años, y aunque cuando tomó la decisión jamás pensó en si iba a volver o no a estar con alguien, hoy se siente plena. “(En ese tiempo) Me enfoqué en mis dos hijos, en mi trabajo y en mí. Creo que eso ayudó porque empecé a ver resultados en mipega, sentí que sí podía, entonces me sentí completa”, afirmó.
La meteoróloga también señaló que aventurarse en una nueva relación fue algo difícil y que requirió de un proceso muy reflexivo, sobre todo porque pasar por un quiebre no es fácil.
“Hay un temor de no volver a pasar por lo mismo. Siempre está el temor a fracasar otra vez (…) Nunca pensé que se me daría (una oportunidad en el amor). Tampoco dejé de hacer cosas, igual salía con mis amigos, tenía vida social, quizás eso ayudo“, indicó.
También reconoció que lo conversó harto consigo misma e hizo un mea culpa, respecto a su quiebre anterior, comentando que cuando pasa algo así “la responsabilidad es compartida”. Luego, empezó a hacer ciertos cambios en su vida como preocuparse más de su desarrollo personal y junto con eso vino lo de arreglarse más. “Ahí entendí que cuando uno está bien consigo mismo, todo marcha mejor“.
Por último, comentó que cuando decidió abrirse a esta nueva relación pensó: “La vida es corta y hay que vivirla sin temores. Pensé que todavía soy joven y también que había que ser responsable con una nueva relación, saber llevarla mejor y con eso cuidar a mis hijos. Hubo un momento en que dejé de sentir miedo“, sentenció.
