¿Se pueden adoptar nuevas conductas, por coherentes o insólitas que sean, tras ver una producción audiovisual? En el último tiempo ha quedado demostrado que sí. Una de ellas es la que ocurre con la serie You de Netflix y que ha llevado a más de algún seguidor a dejar a un lado el uso de las redes sociales.

Pero no es el único ejemplo si de responder la pregunta se trata. Ya es conocido lo que sucede con los fanáticos de Bird Box, quienes en la intención de imitar la actuación de Sandra Bullock, se vendan los ojos y optan por caminar en el lugar que sea, con el riesgo de chocar con alguna persona, caerse o ser atropelladas si se está en el sector céntrico de una ciudad.

Hay otras que nos han marcado porque buscan romper paradigmas negativos respecto a problemas que afectan a una parte de la sociedad, como el caso de Atypical. En esta serie se muestra cómo un joven autista de 17 años se inserta en su grupo de amigos y comienza a socializar. ¿Lo mejor? es que no se ignora la condición del adolescente, pero tampoco se exagera.

Mientras que You, una producción que cuenta con 10 capítulos en su primera temporada, habla sobre lo que puede experimentar una persona cuando convive con una que es obsesiva y controladora al momento de determinar quiénes serán sus amigos virtualmente.

Está basada en la novela homónima de Caroline Kepnes y retrata la historia de Joe Goldberg, quien trabaja en una librería y conoce a Beck, una mujer que desea incursionar en el mundo de la literatura. Y si bien, en la teoría, pueden funcionar como un complemento afectivo y laboral, el hombre termina por dominar sus redes sociales y marginarla de su grupo cercano.

Entre broma y verdad, son muchas las personas que han evaluado, en Twitter, la posibilidad de seguir presentes en las diferentes plataformas de comunicación:

¿Y tú? ¿Qué harías si conoces alguien que toma posesión de tu teléfono celular y determine quiénes pueden hablar o no contigo?