Este lunes a eso de las 8:30 de la mañana nacieron las esperadas trillizas del ex chico Rojo junto a su esposa Camila Guzmán.

Emilia, Maite y Tania nacieron de siete meses, y pese a que Leandro esperaba un varón entre las recién nacidas, para el que incluso tenía nombre agendado (Nicolás), asegura estar feliz de que todo salió bien. Eso sí, las pequeñas deberán pasar un mes en incubadora para luego irse a casa y dormir en las cunas que su propio padre les construyó.

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“Creo que no van a ser tranquilitas porque cuando nacieron lloraron durante 15 minutos seguidos, jajajá”, señala Leandro a LUN, agregando que algo tiene de experiencia pues el año pasado estuvo al cuidado de una bebé de 8 meses (hija de una amiga) con la que aprendió a cambiar pañales. “Fue casi un ensayo de lo que significa ser papá. Estuvimos con ella 6 meses”, agrega.

“Tuve una afinidad súper especial con esa guagua. Se quedaba dormida conmigo en 10 minutos, súper rápido (…) Ojalá que ha ellas las pueda hacer dormir en una hora. Pero claro, cuando una llore, se van a despertar todas, se van a enfermar al mismo tiempo”, confiesa.

Ante este escenario, el ex chico Rojo ideó un “plan maestro” para que sus pequeñas estén cien por ciento cuidadas. Pues en algunas semanas comienza la temporada alta de eventos y deberá ausentarse bastante de casa.

El cantante espera poder hacerlas dormir muy rápido, ademàs una señora los ayudará en casa y dispondrán de toda su “red familiar” para que participen del cuidado de sus hijas.

Cabe señalar que las guaguas prematuras se alimentan cada dos horas y media, según señala el pediatra Daniel Valenzuela, médico de Urgencias del Hospital San Borja. “Los niños prematuros son inmaduros, delicados y chiquititos. Eso, multiplíquelo por tres. Es una locura (…) Las mamá están todo el día en función de los trillizos, es una pega de tiempo completo. Porque, cuando ella termina de alimentar y mudar una guagua, y pasa a las otras, ya se le pasó el rato para darle comida de nuevo a la primera“, comenta.