La dieta Keto -también llamada cetogénica- se ha vuelto muy popular hoy en día. Muchas personas en busca de bajar de peso se han sumado a la disciplina de consumir alimentos ricos en grasas y reducir los carbohidratos.
Sin embargo, cabe preguntarse si este régimen resulta apto para cualquiera. Incluso más importante: ¿es una buena idea seguirla durante el embarazo? ¿Podría perjudicar al bebé en camino?
“La evidencia científica relacionada con la implementación e impacto de una dieta cetogénica durante el embarazo es escasa e incipiente, destacándose además que varios de los estudios disponibles han sido desarrollados en animales“, aclaró Evelyn Sánchez, académica de la escuela de Nutrición y Dietética de la Universidad de Las Américas.
También puedes leer
En este panorama, dice la especialista, es difícil precisar la compatibilidad y se opta por evitar su recomendación en este período tan relevante para la futura madre.
“Además, en esta etapa, las necesidades nutricionales calóricas, de macro y micronutrientes, se encuentran mayoritariamente aumentadas, por lo que la restricción de un nutriente en específico podría ser contraproducente o muy difícil de balancear“, añadió en conversación con Página 7.
Riesgos de la dieta Keto en el embarazo
“Siguiendo una dieta baja en carbohidratos o cetogénica, se ha reportado mayor riesgo de defectos congénitos, por ejemplo, a nivel del tubo neural como espina bífida y anencefalia, entre otros”, advirtió Evelyn Sánchez.
En esa línea, explicó que la dieta Keto ha sido estudiada en gestantes con epilepsia refractaria con el fin de reducir las crisis convulsivas, “sin embargo, el impacto en el feto no ha sido especificado, por lo que actualmente no es considerada como alternativa“.
La misma situación ocurre en diabetes gestacional, donde no es considerada una estrategia para el manejo de esta patología, concluyó la especialista.
