Aftas y herpes son dos tipos diferentes de lesiones que aparecen en la zona de la boca, y lo cierto es que suelen confundirse, pero hay que poner atención a sus diferencias, pues varían las causas y también los tratamientos.

Las aftas, también llamadas estomatitis aftosas o úlceras aftosas, son una enfermedad inflamatoria de origen no infeccioso de la mucosa bucal, que se caracteriza por heridas que aparecen en el interior de la boca, precisamente en el tejido blando o en la base de las encías.

Estas lesiones son de forma ovalada o redonda, y en su interior tienen una superficie blanca o amarilla, y poseen un halo eritematoso o enrojecido. Si bien la causa es desconocida, se sabe que no es infecciosa y, por lo tanto, no se contagia.

En Página 7 conversamos con la directora de la Escuela Técnica de Enfermería de la Universidad de las Américas, Beatriz Arteaga, quien explicó más detalles sobre esto.

Pueden ser múltiples los factores que causan las aftas. Pueden ser estados de estrés, factores hormonales, traumatismos de la mucosa oral, alergias o irritación por ciertos alimentos, disminución del sistema inmune, cierta predisposición genética o familiar, falta de vitaminas como la B12 o el hierro, y algunas enfermedades como la artritis reumatoide, el VIH o la condición celíaca. También la enfermedad de Chron”, comentó la especialista.

Aftas | Clínica Las Condes
Aftas | Clínica Las Condes

Una vez que aparecen las aftas, sus síntomas principales son el dolor y la molestia al hablar y comer. Duran aproximadamente de una a dos semanas y curan solas. Es decir, son autolimitadas.

¿Cómo prevenirlas? Controlando todos los factores desencadenantes. Es decir, evitar estados de estrés o manejarlos, privilegiar los alimentos saludables, no irritantes, como las frutas y verduras, y evitar chocolates, aliños, ají, las especias, papas fritas, etc.

Además, Arteaga recomienda mantener hábitos de higiene bucal regular, “privilegiando cepillos de cerdas suaves, el uso de seda o hilo dental que no traumatice la mucosa, corrigiendo o mejorando el aporte de vitaminas y hierro en la dieta, y controlando las enfermedades que pueden desencadenar también estas lesiones”.

Herpes

El herpes labial, en tanto, se produce principalmente por un virus llamado herpes simple. Es decir, es una enfermedad infecciosa, que puede contagiarse.

Estas lesiones se sitúan principalmente en los labios o en la piel circundante de los labios. Son pequeñas ampollas con líquido en su interior, que se ubican una al lado de la otra. En su conjunto conforman una lesión generalmente de bordes irregulares.

“Duran aproximadamente de dos a cuatro semanas, y en los niños, además de manifestarse las lesiones, puede haber fiebre o decaimiento”, advirtió Beatriz Arteaga.

“Es súper importante resaltar que el virus que ocasiona estas lesiones está presente en un gran porcentaje de la población, pero este se activa y produce estos brotes o lesiones ante ciertas circunstancias o condiciones, como exposición al sol, disminución del sistema inmune, fiebre, otras infecciones virales, períodos de estrés, etcétera. Por lo tanto, para prevenirlas debemos controlar todos estos factores desencadenantes”, añadió.

Por último, cabe mencionar que, a diferencia de las aftas, el herpes sí puede tener tratamiento y se utilizan fármacos antivirales de uso tópico o cremas, y también algunos fármacos antivirales de uso oral.