Incluir poco a poco productos que ayuden a mejorar nuestra alimentación, son algunos de los consejos que entregan los expertos en nutrición para dar con una dieta balanceada.

Esto, pues muchas veces nuestra ingesta diaria está más centrada en el consumo de carbohidratos, cuando se debería tener una cantidad equilibrada de ellos junto con vegetales, frutas y semillas.

De hecho, estas últimas tienen grandes propiedades para nuestro organismo, por lo que de acuerdo a lo señalado a Página 7 por la nutricionista María José Estrada, se deben incluir en nuestra dieta al ser “ácidos grasos saludables que ayudan a disminuir el colesterol en la sangre, lo que favorece nuestra circulación sanguínea y beneficia grandemente la salud de nuestro corazón”, dijo.

Al mismo tiempo, las semillas contienen una gran cantidad de fibra, “lo que ayuda a mejorar la salud intestinal como disminuir el estreñimiento, mejorar la absorción de nutrientes y prevenir enfermedades de colon o intestino”.

A ello, se suma que “son altas en antioxidantes lo que previene el envejecimiento prematuro y también aportan saciedad”, un componente ideal para quienes desean perder peso y controlar las ganas de comer.

¿Qué semillas incluir en nuestra dieta?

De acuerdo a la especialista del Centro Nutricional Nutrimentum, son dos las semillas que no deberían faltar en la alimentación; se trata de la chía y el sésamo.

En relación a la primera, María José comentó que esta “posee beneficios para mejorar nuestro tránsito intestinal y disminuir el colesterol y el azúcar en la sangre, lo que favorece mucho a los pacientes con patologías como la diabetes o resistencia a la insulina, tanto para prevenir como para tratar esta enfermedad”.

Alimentos para caída de pelo
Visual Hunt (cc)

Con respecto al sésamo, aseguró que “además de las propiedades que tiene toda semilla, colabora a aminorar los dolores de artritis, artrosis y prevenir el cáncer de colon”.

¿Quiénes no pueden consumir semillas?

Sin embargo, la ingesta de este alimento debe ser moderado en ciertas personas como aquellas que presentan colon irritable o presión baja.

“Algunas personas presentan complicaciones con el consumo de semillas enteras. Por ejemplo, pacientes que están diagnosticados con colon irritable pueden presentar inflamación intestinal con el consumo frecuente de semillas, por eso es importante acudir a un profesional que le indique cómo consumirlas, el horario y las comidas”, precisó.

Y añadió: “Se pueden evidenciar contraindicaciones en personas que tienen presión baja, ya que favorecen a disminuirla, por ende debieran evitar el consumo diario y consumirlas unas dos veces por semana”.