El cine, la publicidad, la televisión, nos han vendido por décadas una imagen sobre el sexo que dista bastante de lo que es la realidad. Para qué hablar de la industria pornográfica donde todo parece ser puro disfrute al servicio del espectador.

Las películas románticas también han hecho lo suyo al situar -por ejemplo- relaciones sexuales en los más insólitos lugares, dando a entender que en estos precisos espacios vas a tener el mejor y más romántico sexo de tu vida. Error.

Uno de estos lugares suele ser el mar, aunque también están la piscina o incluso la ducha, donde las parejas dan rienda suelta a su pasión, comunicando que realmente lo están pasando increíble.

No obstante, si te animas a intentarlo, lo más seguro es que en cuestión de minutos desaparezca de tu mente esa fantasía ideal que tenías sobre esta experiencia y te enfrentes a una situación más bien incómoda y hasta dolorosa.

Y es que a juzgar por las opiniones de varios expertos, tener sexo bajo el agua no es la mejor idea que se le pueda ocurrir a una pareja, si es que esa relación incluye penetración, ya que las condiciones ambientales dificultarían esa práctica.

Dicho lo anterior, ¿es recomendable tener sexo bajo el agua? La respuesta no sería un “no” rotundo, sino que más bien habría que poner énfasis en las recomendaciones y matices, los que sí pueden permitirnos disfrutar de una experiencia sexual óptima.

Para la doctora y sexóloga Megan Stubss, el sexo bajo el agua con penetración, ya sea vaginal o anal, “no es recomendable” puesto que no suele ser “despreocupado y divertido como nos han hecho creer”, señaló al medio Elite Daily.

En este contexto, existen al menos tres razones por las que tener sexo bajo el agua no es la mejor opción si quieres tener una velada memorable.

1.- Los condones suelen ser menos efectivos y se rompen más fácil

La obstetra y ginecóloga Lakeisha Richardson, señaló que los productos químicos presentes en una piscina y/o en un jacuzzi, pueden debilitar el látex. La doctora Stubss agregó que el calor del agua en una piscina temperada o tina caliente, también compromete la efectividad.

Otro punto importante, es que la fricción y el contacto con el agua también aumenta las posibilidades de que se rompa, dejando expuesto a ti o a la otra persona a alguna ITS o a un embarazo no deseado.

2.- El agua elimina la lubricación natural del cuerpo

En la misma línea, Stubss aseguró que el agua, sea cual sea su origen, elimina la lubricación natural del cuerpo, lo que provocará una relación sexual más dolorosa. “A partir de la penetración, el agua entrará en la vagina y eliminará su lubricación natural, lo que podría provocar microabrasiones y, por ende, un coito doloroso“, detalló.

Por su parte, Richardson indicó que los químicos agresivos como el cloro también pueden secar tu piel y sus mucosas, por lo que después es posible que necesites un humectante vaginal para rehidratar el tejido de esa zona.

sexo bajo el agua
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3.- El sexo bajo el agua aumenta el riesgo de contraer una infección

Cuando estamos frente a una piscina, o a un lago o en el mar, nunca sabremos qué tan contaminada estará el agua. Hasta el agua caliente de la tina puede ser un enemigo si es que ya tienes una infección bacteriana.

Megan Stubss explicó a Elite Daily que las probabilidades de contraer una infección urinaria o una vaginosis bacteriana aumentan cuando se tiene sexo con penetración bajo el agua. “Entre el potencial de las microabrasiones y las bacterias en el agua, se crea un ambiente perfecto para la entrada de éstas en el organismo“, indicó.

Cabe recordar que siempre que entra alguna sustancia extraña en la vagina o uretra, se corre el riesgo de alterar el pH, lo que puede provocar un problema mayor.

Otra situación molesta y dolorosa que se puede presentar, es la que describió la ginecóloga y obstetra del Hospital Red D’Or São Luiz, Poliani Prizmic, quien indicó que al tener sexo bajo el agua, el movimiento de la penetración bombea agua dentro de la cavidad vaginal. En esta situación, el agua puede pasar por el cuello del útero y llegar hasta las trompas, lo que causaría dolor después del acto y hasta una inflamación en la región. Algo similar ocurriría en el caso del sexo anal, pues en este caso el agua llegaría hasta el intestino y también habría dolor.

Igualmente quiero intentarlo: ¿qué es lo más recomendable?

Si eres valiente y quieres intentarlo igual, entonces la sexóloga recomienda que lo mejor es realizar algunos juegos sexuales previos en el agua y luego “pasar a tierra firme”, si es que quieres sexo penetrativo.

Ahora si lo tuyo realmente es intentarlo con todo bajo el agua, entonces lo más aconsejable es usar un buen lubricante de silicona, sobre todo si usas condón, ya que tiene una viscosidad más alta y eso hará que su duración sea mayor en condiciones húmedas. Si es sin preservativo, prueba con un lubricante a base de aceite, pues así el agua no lo “lavará” tan fácilmente.

La psicoterapeuta especialista en sexualidad, Vanessa Marin, también coincide en que lo mejor es llevar a cabo otros juegos eróticos en el agua y no darle tanta importancia al coito en sí mismo, consignó Bustle.