En tiempos de pandemia es fundamental el cuidado e higiene de los alimentos pero, a su vez, hay que recordar que no es el único virus que puede afectar la salud.
Los alimentos son una principal fuente de infección si el cuidado de manipulación y limpieza no es el adecuado. Pero ¿Cuál es la limpieza adecuada? ¿Se tienen todos que someter al mismo proceso?
Es la nutricionista y farmacéutica Elisa Escorihuela Navarro quien aclara estas dudas en ABC y comenta sobre qué alimentos se deben consumir posterior al lavado y cuales no requieren de ello. Incluso, menciona, hay algunos cuya desinfección puede ser contraproducente y perjudicial para la salud.
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Un aspecto importante que sí o sí debemos considerar es ser higiénicos con los utensilios y las superficies que vamos a utilizar para la preparación de alimentos, todo esto, con el objetivo de no permitir la conocida contaminación cruzada.
La profesional indicó que es normal que los alimentos tengan bacterias, sin embargo, hay que tener presente cómo debemos consumirlos para evitar cualquier problema para la salud.
Alimentos que se deben lavar para consumir
Según la nutricionista, dentro de la lista de alimentos hay una gran variedad, entre las cuales se encuentran las verduras, frutas y hortalizas frescas.
Este tipo de alimentos han estado en contacto directo con la tierra, por lo que, para estar en el mercado, han pasado por un largo trayecto, desde el suelo hasta las manos de los compradores.
En este recorrido, las verduras, frutas y hortalizas han estado en contacto con microorganismos, insectos, tierra y fertilizantes. La forma más efectiva de erradicarlas de los alimentos es a través del uso de fórmulas preparadas que venden en supermercados, pero, también existen dos opciones sencillas de probar en la comodidad del hogar.
Una de estas opciones es mezclar 3 litros de agua con una cucharadita de cloro, sumergir las verduras al menos 5 minutos y enjuagar.
Otra opción es diluir un vaso de vinagre en un litro de agua y sumergir las verduras durante 10 minutos.
De igual forma, dentro de la lista de alimentos que se deben lavar se encuentran las legumbres, principalmente porque pueden tener restos de polvo y tierra, propio de la elaboración del producto.
Para lavar este tipo de alimento, puedes optar por sumergirlas en una fuente con agua, frotarlas entre sí y finalmente buscar que desprendan todas las impurezas que tengan, sin olvidar enjuagar para después remojar y preparar.
La quinoa es un alimento que puede contener impurezas pero, a su vez, en la superficie del grano, existe un componente llamado saponina que se debe sí o sí eliminar, dado el grado de toxicidad que este tiene.
Para lavar la quinoa, se debe poner en un colador, aplicar agua fría por unos minutos y posteriormente ya se puede utilizar para alguna preparación.
El arroz, en tanto, se debe lavar por diversos factores, principalmente para eliminar el arsénico que puede haber externamente pero, junto a ello, el almidón, permitiendo que el arroz quede más suelto y graneado.
Para lavar este carbohidrato se debe poner en un colador y dejar correr el agua hasta que salga transparente, eso significa que el almidón y el arsénico se han eliminado por completo.
¿Qué no debemos lavar?
Tal como existen alimentos que deben ser lavados para el consumo, hay otros que no deben pasar por este proceso, dado que puede resultar perjudicial para la salud y contaminar el resto de la preparación.
Unos de estos son la carne y el pescado, principalmente porque el agua es un conductor perfecto para la expansión de microorganismos y contaminación.
La mejor manera de higienizar este tipo de alimentos es el calor, por lo que siempre se recomienda cocinarlos por sobre los 65°C.
Para consumir este tipo de alimentos en un formato crudo, deben ser productos congelados y deben haber estado a bajas temperaturas por un plazo no menor a 5 días.
El huevo es otro de los alimentos que no deben pasar por un proceso de lavado, dado que su cáscara tiene porosidades, por lo que la suciedad puede pasar al interior con el agua.
Los champiñones y las setas son alimentos que con un poco de agua se pueden estropear, razón por la cual es mejor usar un cepillo o limpiarlos uno a uno con papel de cocina.
Las propiedades de las legumbres y verduras en conserva se pierden con el agua, por lo que no se recomienda pasarlo por un proceso de enjuague, solo eliminando el líquido interior es suficiente.
Finalmente, no es necesario lavar las verduras en bolsa o ensaladas preparadas, esto las pondría en riesgo de contraer posibles bacterias.
