Dentro del cuidado de la piel y el famoso enfoque antiedad, la preocupación está puesta principalmente en el rostro, cuello y escote.
Mucho se habla que estas zonas son las que reflejan nuestra verdadera edad y, actualmente, el mercado de la cosmética está “plagada” de productos que guían a la misma dirección.
Sin embargo, existe otra parte del cuerpo que generalmente se olvida pero que, de acuerdo a especialistas, expone aún más el envejecimiento en comparación al rostro y el cuello: las manos.
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Según explicó al portal ABC la Dra. Sara Carrasco, dermatóloga y miembro de la Academia Española de Dermatología y Venereología, los signos del envejecimiento son imparables y uno de los mayores “enemigos” de las manos que ayuda a acelerar este proceso es la radiación solar.
“Con el envejecimiento, es frecuente que aparezcan alteraciones en el tono de la piel y lesiones como pequeñas manchas redondeadas de color marronáceo. Estas lesiones pigmentadas (manchas) se relacionan directamente con la radiación solar recibida”, explicó.
Pero este no es solo un tema estético, indicó la profesional. Lo anterior, puesto que estas manchas “pueden ser precursoras de queratosis actínicas y lesiones cancerosas y, por tanto, deben revisarse de forma periódica en la consulta del dermatólogo”.
Leticia Carrera, especialista en medicina estética, coincidió con Carrasco y aseguró que el principal factor que daña la piel de las manos es el fotoenvejecimiento, es decir, la exposición al sol.
“Hacemos mucho hincapié siempre en el fotoevejecimiento en rostro y escote, pero muchas veces nos olvidamos de las manos, y el daño producido por el sol es idéntico”, acotó.
En esta línea Carrera señaló que, además de las machas, otro signo de envejecimiento en las manos es la pérdida de grosor de la piel, pues al ser más fina esta se arruga con mayor facilidad.
Consejos para cuidar las manos
Como se mencionó anteriormente, no podemos evitar que con el tiempo aparezcan signos de envejecimiento en nuestras manos, pero sí podemos retrasar su aparición algunos años.
Para Sara Carrasco, el mejor método es algo tan simple como evitar el sol y aplicar bloqueador solar, siendo este el “principal tratamiento en la piel de las manos”.
Además, recomendó el uso de crema hidratante que incluya factor solar en su fórmula, agregando que durante la noche se pueden aplicar otras que prioricen ingredientes que ayudan a mejorar la calidad de la piel.
Por último, uno de estos ingredientes puede ser el retinol. De acuerdo al portal de la Clínica Alemana, entre sus beneficios destacan “la capacidad de estímulo a la producción de colágeno que retarda los procesos de envejecimiento” y “la disminución de la síntesis de melanina que posibilita un cutis más homogéneo”, entre otros.
