Muchas personas dejan de consumir legumbres, por el simple hecho de que les provoca hinchazón. Sin embargo, existen varias técnicas para reducir ese efecto.

En primer lugar, debes considerar que ese tipo de alimentos, poseen un alto contenido en oligosacáridos, “que es un tipo de almidón resistente, que nuestro intestino no puede descomponer y se queda sin digerir hasta que llega al colon“, explica la nutricionista clínica Kelly Hogan, al diario electrónico Huffington Post.

De ese modo, “los oligosacáridos se descomponen por medio de fermentación bacterial, que produce gases”, añade la especialista. No obstante, el efecto de la hinchazón dependerá de cómo se cocinen las legumbres.

Por ese motivo, la experta destaca algunas técnicas para evitar que te provoquen malestares, y te las mostramos a continuación:

1. Remoja las legumbres

Según explica Hogan, es recomendable dejar las legumbres remojando por la noche y cocinarlas con agua fresca al día siguiente. “Eso ayudará a reducir la cantidad de oligosacáridos”, señala.

De ese modo, lograrás ablandarlas y disolver las membranas de la piel que provoca las flatulencias. Asimismo, es fundamental desechar el agua del remojo y no usarla para la cocción.

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2. Utiliza algunas especias

El diario electrónico La Vanguardia, destaca que algunos condimentos y especias pueden ayudarte a evitar lo efectos de las legumbres.

En ese contexto, aconsejan agregar comino, romero, anís o hinojo a las preparaciones, ya que pueden combatir la inflamación. Por otra parte, puedes tomar infusiones de menta, canela y manzanilla, tras consumir por ejemplo, un plato de porotos.

3. Haz puré

La última opción, es preparar tus legumbres como puré. Cocinarlas a fuego lento y de forma prolongada, provocará la descomposición de los oligosacáridos, siendo más fáciles de digerir.

“Puede que te den vergüenza las flatulencias, pero es una función normal del organismo. Preocúpate más si no tienes gases que si tienes. Si notas cambios en tus hábitos intestinales que no se resuelven, es hora de ir al médico”, explica finalmente Charles Mueller, profesor de Nutrición en la Universidad de Nueva York al diario electrónico.