Según los especialistas, ventilar la casa es clave pues permite cuidar la salud y complementa la limpieza. Por eso, es importante hacerlo todos los días, incluso en invierno.

Si bien en esta temporada se hace casi imposible abrir las ventanas, en la siguiente nota encontrarás algunas recomendaciones para evitar enfermarse por culpa del frío.

De acuerdo a la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA, por sus siglas en inglés), una serie de elementos con los que convivimos a diario repercuten en la contaminación al interior del hogar.

Como “el exceso de dióxido de carbono (CO2), las partículas de alimentos al cocinar, las calefacciones, los hornos que pueden dispersar monóxido de carbono, óxido de nitrógeno o azufre; el pelo de las mascotas, la humedad del baño, duchas y lavadoras”, dice la EPA.

Y según la OMS, las “tasas de ventilación bajas están asociadas a mayores tasas de infección o brotes de enfermedades de transmisión aérea”.

Consejos para ventilar la casa en invierno

1. Abrir parcialmente una ventana: según la OMS, lo más recomendable es abrir un poco la ventana de una habitación dejar las puertas del interior abiertas. Así circulará el aire.
2. Ventilar al mediodía: según el portal Saber Vivir, en invierno el momento con más calor del día es el mediodía, por lo que es un buen momento de abrir las ventanas.
3. Diez minutos bastan para renovar el aire de una habitación. Un dato: mientras más personas vivan en la casa, se hace más necesario airear el hogar.
4. Se aconseja ventilar los dormitorios luego de levantarse y unos minutos antes de irse a dormir.