¿Vives con tu pareja pero no han tenido intimidad durante las últimas semanas? Probablemente, según explican expertos, se deba a la situación actual que enfrentamos por el coronavirus.

Andrés Rascovky, médico psicoanalista y ex presidente de la Asociación Psicoanalítica Argentina: “Hoy el sexo es un tema que no está en un primer plano. ¿Qué paradoja, no? estamos aterrados y no se produce un clima que invite al amor. Creo que por la angustia reinante, se está produciendo una abstinencia generalizada“, expresó, al medio Clarín.

Fernando Marchant, psicólogo de Vidaintegra, explicó a Página 7 que “la respuesta sexual puede estar afectada por factores de carácter biológico o físicos, como también desde el orden psicológico como los aspectos emocionales y sentimentales. Debe haber un equilibrio entre lo erótico y lo afectivo para que se desarrolle una buena respuesta sexual”.

Y agregó: “Las distintas afecciones mentales pueden influir a favor o en contra de una respuesta sexual aumentada o disminuida. Las circunstancias del día a día o aspectos situacionales como la pandemia que está ocurriendo actualmente, pueden afectar el mal resultado en cuanto al deseo sexual“.

Pero también pueden existir otros motivos, no relacionados con el contexto provocado por el coronavirus. “Es importante destacar que también pueden existir en el historial vital de una persona, eventos de carácter traumático a nivel personal, transgeneracional o intra-psíquicos que también pueden jugar en contra de una mejor respuesta sexual. Las primeras experiencias sexuales, pueden marcar el futuro de las respuestas sexuales al quedar condicionada. Hay muchos desórdenes amorosos que se viven a nivel inconsciente que afectan al deseo sexual”, detalló.

¿Qué podemos hacer? Fernando Marchant aconseja “fortalecer el vínculo de pareja desde lo afectivo, acercando posiciones frente a lo diverso, a retomar cosas juntos, ayudándose a entender y resolver los problemas conversando y con respeto. En estos tiempos es importante fortalecer el cariño de manera creativa, de mejorar el trato en atenciones y palabras. En parejas que se respetan hay más posibilidades para conservar sus encuentros amorosos que aquellas parejas que son más inciertas en el tipo de contacto entre ellas.

La psicoanalista argentina Gabriela Goldstein, comentó a Clarín que las parejas que conviven, “son las que de alguna manera estarían a salvo para mantener relaciones sexuales, sabiendo que no hubo viajes al exterior recientes y que se mantuvo el protocolo de aislamiento que decretó el gobierno nacional. Y la pareja que convive que tuvo relaciones ya está, porque intercambiaron besos, fluidos, cama”.

Miedo a contagio

Frente a la llegada del COVID-19, los expertos señalan que, si dentro de la pareja hay un individuo contagiado, no es recomendable tener contacto íntimo para así evitar posibles contagios. A modo de ejemplo y bajo el contexto mencionado con anterioridad, el besar, es una fuente directa de contaminación, sobre todo si consideramos que sólo a través de las partículas de saliva que se expelen al hablar, podemos adquirir el coronavirus.

“De todas formas, la intimidad puede continuar si nos enfocamos en desarrollar una de las prácticas esenciales de Sexualidad Consciente y que se conoce bajo el concepto de Tacto Sensual”, explica Paula González, fundadora y directora de Enea Coach, organización dedicada al acompañamiento y renovación de las personas desde el punto de vista del coaching, la ontología, el eneagrama y la inteligencia emocional.

“La Sexualidad Consciente tiene que ver con disminuir la velocidad. Erróneamente tanto hombres como mujeres nos hemos encasillado en una sexualidad apurada, basada en la fricción que lleva a un ‘peak’ rápido que dura sólo unos segundos, para después quedar cansados. La Sexualidad Consciente, también tiene que ver con regresar al poder de los sentidos, a concentrar tu atención en la sensación corporal del momento, salir de la mente, de la anticipación o de la proyección. Es estar aquí y ahora, presentes en el cuerpo y en la sensación”, explica González.

Bajo este escenario surge lo que se denomina Tacto Sensual, cuyo fin clave es poder transmitir amor profundo a través del tacto. No tiene una finalidad sexual per sé, aunque muchas veces este tipo de práctica puede llevar a un encuentro sexual poderoso, indica.

“En el caso de aquel que ejecuta la acción, su mente debe estar completamente inmersa en la intención de entregar profundo amor y devoción a este otro ser humano, a través del tacto. Es un hacerle el amor a la piel del otro, con el roce suave y tibio de los dedos, ya que estás entregando amor a través de tus manos. Por lo mismo, este tacto deja fuera los genitales, y las zonas erógenas; no es un tacto sexual, es un tacto amoroso”, detalla.

En este contexto, Paula González, entrega algunos consejos claves para iniciar la práctica del Tacto Sensual, con el objetivo de hacer de este momento una instancia de entrega de amor profunda e inolvidable:

· Les aconsejo que preparen el encuentro, se aseguren de tener una superficie suave donde sentarse o recostarse.

· También es importante contar con la temperatura adecuada, luz tenue, velas si es que les agrada y algún aroma que les guste.

· Sugiero poner música para que el sonido les ayude a entregarse a este nuevo placer, el cual no tiene ninguna finalidad más que el placer mismo.

Finalmente, la fundadora y directora de Enea Coach, señala que “una vez que hayan determinado quién entrega y quién recibe, inicien el encuentro sentados frente a frente, y descansando las manos sobre o bajo las manos del otro. Mírense a los ojos, con una mirada suave, inocente y juguetona; mírense desde el corazón, con devoción hacia el otro ser humano que está sentado enfrente y empiecen a disfrutar esta experiencia de manera lenta y sin apuros”.