Debido al aumento de casos por el Covid-19, en algunos países se han tomado ciertas medidas para evitar los grandes movimientos y aglomeraciones de personas. Incluso, algunos individuos están tomando precauciones por su cuenta evitando los medios de transporte público.
Aunque no se sabe con exactitud cómo se propaga el coronavirus ¿Es posible contagiarse en el metro o en las micros? Según consigna la BBC, para el Servicio Nacional de Salud británico (NHS, por sus siglas en inglés) el transporte público es un “riesgo potencial” que depende de “qué tan llenos de gente estén y esto varía, según el horario y la zona”.
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Según indican estos expertos, el contagio se produce al inhalar parte de los estornudos de una persona infectada y tocando superficies contaminadas, en un radio de al menos dos metros y por más de 15 minutos.
Por su parte, en un estudio del Instituto Global Health (Londres) publicado el 2018, demostraron que existe una relación entre el uso de los trenes subterráneos y la posibilidad de contagiarse de enfermedades respiratorias.
“Muestra en particular que los vecindarios con menos líneas —donde la gente se ve forzada a cambiar de metro una o más veces—, el índice de enfermedades como la gripe es más alto, en comparación con las zonas con mejor servicio, donde los pasajeros pueden llegar a su destino con un viaje directo”, dijo la autora de la investigación Lara Gosce.
Para viajar en transporte público, Gosce recomienda tres cosas:
1. Limitar el número de “encuentros cercanos con personas y objetos potencialmente infectados”
2. Evitar viajar en horario punta
3. Si es posible, elegir una ruta que involucre solo un medio de transporte, para no realizar trasbordo.
Asimismo, el asesor especial sobre el coronavirus de la Organización Mundial de la Salud (OMS), David Nabarro, informó al medio internacional, que si bien el transporte era algo a considerar, los hechos confirman que el “contacto fugaz” de viajar con otra gente (posiblemente contaminada) no configuraría una “fuente de transmisión importante”.
Los aviones
Para el profesor de la Universidad de Purdue (Estados Unidos), Quigyan Chen, quien investiga la calidad del aire en distintos vehículos de pasajeros, señaló que el aire de un avión se cambia más rápido (cada 2 a 3 minutos) que en un edificio con aire acondicionado (cada 10 a 12 minutos).
Por otro lado, la vía de transmisión puede ser a través del contacto de superficies contaminadas del avión. Para Vicki Hertzberg, de la Universidad Emory (Estados Unidos), quien tomó muestras de superficies en 10 vuelos internacionales en el 2018, descubrió que “se veían como las muestras de la sala de una casa”.
De acuerdo a Hertzberg, las zonas de más riesgos de contaminación dentro de una cabina son las dos filas por delante, por detrás y por el costado.
Finalmente, agrega que la principal preocupación respecto a los viajes en avión es que pueden transportar personas potencialmente infectadas de un lugar del mundo a otro.
