El ‘exercise snacking’, como expresa su nombre en inglés, trata de “bocadillos” o “bocados”, pero en esye contexto no se refiere a los alimentos, sino a aquellos períodos cortos en los que podemos realizar ejercicios de alta intensidad.

Números de Public Health England, indican que los niveles de actividad física se encuentran constantemente en disminución, siendo las mujeres más propensas a estar inactivas en la mayoría de los casos, a diferencia de los hombres.

Por su parte la Organización Mundial de la Salud, recalcó que un tercio de la población no cumple con los 150 minutos de ejercicios por semana recomendados por el Servicio Nacional de Salud del Reino Unido (NHS). Por eso no debemos dejar pasar esta solución de “refrigerios de ejercicios” que nos trae la ciencia para no caer en un comportamiento perezoso.

Un nuevo estudio difundido en la revista de investigación Applied Physiology, Nutrition and Metabolism de la Universidad de McMaster en Canadá, avala esta nueva modalidad (Merienda de ejercicio) donde se realiza un vigoroso esfuerzo en tiempos más pequeños, contribuyendo de esta forma a la salud cardiovascular además de mejorar el rendimiento funcional.

Específicamente se evaluó el efecto de breves ejercicios como subir escaleras en el consumo máximo de oxígeno, logrando determinar que es más efectiva esta reducida acción para controlar el azúcar en la sangre, que una sesión completa de entrenamiento diario.

La rutina desempeñada por los participantes de este análisis fue la siguiente:

– Realizar 3 veces al día un ascenso enérgico de una escalera de tres tramos (60 escalones), con un tiempo de recuperación de 1 a 4 horas entre jornadas.

Las limitaciones de tiempo o la ubicación del recinto deportivo, que son las principales causas para no asistir a extensas clases en un gimnasio, no serán ahora un impedimento para mejorar nuestro estado físico.

Así que manos a la obra y a ponernos en acción, subiendo todas esas escaleras presentes en nuestro día a día, para cambiar potencialmente nuestra vida.