Eficaz en el control de enfermedades, ayuda la regeneración y a mantenerse joven. Estas y muchas otras propiedades beneficiosas sitúan al ajo como uno de los alimentos indispensables dentro de nuestra alimentación.
Perteneciente a la familia de las liliáceas, como la cebolla, se cree que esta hortaliza es originaria de Asia Central y llegó a Oriente Medio hace unos cuatro mil años. Se planta en invierno y el bulbo, la cabeza formada por los dientes de ajo, se cosecha a principios de verano.
También puedes leer
A pesar de sus variadas propiedades medicinales, el ajo también puede ser nuestro gran aliado en la cama, ya que según un artículo publicado por La Razón, este aumentaría la líbido y permitiría mantener la erección.
¿Por qué?
De acuerdo al portal español El Mundo, los superalimentos como el ajo ayudan a tener una vida sexual más sana, atacando directamente tres frentes: la libido, el arranque de las relaciones y aumentando la duración de las mismas.
Esto porque es un alimento rico en sustancias y nutrientes fundamentales para el organismo, como las vitaminas del grupo B, vitamina C, azufre, iodo, fósforo y magnesio.
Lola Núñez Prado, bióloga especialista en nutrición, explicó al medio español el por qué.
“La presencia de zinc en el ajo, hace que se mejore la fertilidad y en los hombres aumenta el apetito sexual, al ser un mineral clave en la síntesis de hormonas sexuales y en concreto de testosterona, hormona sexual masculina… El ajo negro sería mucho más efectivo en ellas, por la mayor cantidad de vitamina C y complejo B“, señaló.
Además, según la especialista, esta hortaliza es rica en arginina, un aminoácido vasodilatador que se utiliza como remedio para la disfunción eréctil.
Contiene además alicina, la que, en combinación con la vitamina B1, se transforma en un elemento llamado allidiamin que estimula tanto la líbido como la actividad sexual.
Además, “el consumo de ajo mejora la respiración, despejando las vías respiratorias. De esta manera podría incluso ayudar a llegar más fácil al orgasmo al oxigenarnos bien“, señaló la especialista.
Cómo consumirlo y no morir en el intento
Para Núñez, consumir entre uno y tres dientes de ajo al día sería suficiente para obtener todos estos beneficios y lo puedes ingerir tanto crudo como cocinado, fresco, seco en polvo, o encurtido.
“Aunque la mejor forma sería el consumo de ajo negro, que presenta mayor concentración de nutrientes y además no produce mal olor… Si somos grandes amantes del ajo y de su sabor en la cocina, esa sería la manera más adecuada. Si, por el contrario, queremos disfrutar de sus grandes propiedades pero no podemos con su sabor, la mejor alternativa sería tomarlo en extracto, siguiendo siempre una dieta sana y equilibrada”.
Otras propiedades
De acuerdo a El Mundo, son numerosos los beneficios que nos aporta el consumo regular de ajo, entre los cuales se destacan sus poderes antioxidantes, su capacidad cardioprotectora, su potencia en la limpieza hepática y estimulación del sistema inmune, solo por nombrar algunas.
