Siempre se ha dicho que las mascotas cumplen un rol muy importante dentro de un hogar, al punto de convertirse en un integrante más de la familia.
Es que el compañerismo y lealtad que entregan a los humanos es algo impagable, llegando incluso a convertirse en un sostén emocional para alguien que está viviendo un difícil momento anímico.
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Así es como surgieron los llamados animales de apoyo emocional, concepto que nació en Estados Unidos, y que son mascotas que tienen un rol en la psicología moderna para tratar trastornos como ansiedad, estrés pánico, depresión, fobia social, entre otros, según detalló el portal especializado Therapy chat.
“No es un tratamiento ni apunta a la cura, si no en un momento de un determinado tratamiento, se puede utilizar para concretar, ayudar a disminuir estrés, aumentar la confianza, disminuir tensiones, vincularse sin ser juzgado ni demandado”, explicó a Página 7 Luis Pino, académico de la Escuela de Psicología de Universidad de Las Américas.
¿Cómo sé que necesito uno?
Lo importantes no es autodiagnosticarse, ya que no es lo mismo tener una mascota por gusto, que necesitar una para casos como estos, ya que los animales de terapia están junto a sus dueños en todo momento.
Según detalló el sitio VIX, ellos dan tranquilidad y compañía a quien lo necesite por orden de un psiquiatra.
Para eso es necesario acudir a un especialista, el que extiende un certificando explicando la necesidad psíquica que tiene el paciente de andar con el animal para todos lados, ya que estas personas suelen perder el control con facilidad.
¿Qué tipo de animales pueden cumplir esta función?
Aunque cualquiera puede asumir este rol de contención, por lo general son perros o gatos (animales domésticos más comunes), siendo incluso aquellos que han estado junto a sus dueños por muchos años, ya que no requieren un entrenamiento específico, como en caso de los canes guías.
“Para que un animal sea certificado como mascota de soporte emocional no requiere de un entrenamiento especial, como los perros para gente con discapacidad visual, sólo necesitan ser entrenados de manera básica para que puedan viajar sin problemas en el avión con el resto de los pasajeros, por ejemplo. Que deban obedecer las instrucciones de sus dueños, no olisquear ni ladrar a las demás personas o animales, y lo más importante es que sea sociable. No se aceptan como animales agresivos”, explicó la psiquiatra Gloria Basto en su página web.
Sin embargo en casos más serios (como autismo o Síndrome de Down) sí es necesario hacer un trabajo más intensivo con el animal. “El entrenamiento es dependiente de la función que cumplan, es por ello que disminuir el estrés, ansiedad, entre otras dificultades, lo puede hacer cualquier animal o mascota. Por ejemplo, síndrome de Down o trastornos del espectro autista se ha utilizado principalmente hipoterapia, con entrenamiento y crianza especial para ello” detalló Pino.
Es importante entender que lo que convierte a una mascota en uno de soporte emocional no es el animal en sí, sino la necesidad anímica que tiene su dueño de tener una contención.
Contigo siempre
Como mencionamos anteriormente, estos animales pueden estar con su dueño en todo lugar, incluso en la cabina de un avión; a pesar de ello, las críticas han abundado respecto a este tema.
En un reportaje del New York Times, se reveló que existen médicos en Estados Unidos que ofrecen por una determinada cantidad de dinero, emitir los certificados, además en internet existen sitios donde los venden de manera irregular, mal utilizando un recurso que es de gran ayuda para los que realmente lo necesitan.
Por eso es importante que las personas que lo requieren realicen todos los trámites de la manera que corresponde y con el respaldo de un profesional, de esta manera la sociedad le tomará el peso real a estas mascotas.
