¿A quién no le ha pasado alguna vez en la vida?, la mayoría de las personas hemos sufrido del tan molesto e incómodo hipo.

Este se produce por una falta de relajación del diafragma, que es el músculo que separa la caja torácica de la caja abdominal.

“Cuando existe algún estímulo de este músculo se produce el hipo. Que es una contracción espasmódica que no se puede controlar y produce esta sensación de regurgitamiento”, aclaró la doctora Nelly Baeza, directora del Centro de Salud Pública.

La causa principal es el aumento del volumen gástrico. “A los bebés o a las personas cuando comen muy rápidamente, la bolsa gástrica se irrita o posa sobre el diafragma y produce estos espasmos involuntarios del hipo”, explicó la especialista.

Este tipo de hipo no es para preocuparse, ya que se pasa en pocos minutos. “Por ejemplo, cuando las personas han hecho un discurso, han hablado mucho tiempo o han comido rápidamente, se les produce hipo y, en la medida que el vaciamiento gástrico se produce en unos 15 o 20 minutos, debería pasar la crisis de hipo”, indicó Baeza.

Sin embargo, existe un tipo de hipo que se produce por otras causas y que puede significar un problema mayor de salud.

“La causa más infrecuente es que exista un tumor aledaño al diafragma que haga que se produzca este movimiento involuntario”, añadió.

Si el hipo se mantiene durante durante una hora continua y no se soluciona de manera natural, habría que pedir ayuda médica y recurrir a ciertos fármacos.

Además, si es que no se soluciona, habría que realizar exámenes para determinar si existe la presencia de un tumor o que sea causado por algún trastorno sicosomático.

Estudios ecográficos o de resonancia son algunos de los exámanes que se utilizan para determinar las causas que generan el hipo que tiene una mayor duración.